La Estación de Aviso de Plagas de Carracedelo lanza una advertencia sobre la posible proliferación de fuego bacteriano, que está afectando a los frutales bercianos, apunta, en concreto perales, manzanos y membrillos. Esta grave enfermedad de los frutales está causada por la bacteria Erwinia amylovora, cuyo desarrollo se ve favorecido por temperaturas suaves y humedad. “Esta enfermedad es capaz de matar un árbol en pocas semanas”, apunta. Cortar, arrancar y quemar los árboles enfermos es la única medida de control eficaz. “Mantener las plantaciones frutales sanas es tarea de todos, y además es una obligación, para conseguir minimizar la expansión de la enfermedad en nuestra comarca”.
Ante esta situación se recuerda que se debe aplicar un tratamiento de cobre u otra materia activa autorizada para fuego bacteriano lo antes posible tras la cosecha. Usar un cobre autorizado en postcosecha y que esté autorizado para bacteriosis o específicamente para fuego bacteriano. Todos los fruticultores deben revisar minuciosamente sus plantaciones, especialmente si son perales, en busca de árboles afectados.
Se recuerda también que en esta época la enfermedad avanzará muy velozmente.” Las previsiones climatológicas que tenemos de lluvias favorecen el desarrollo de la enfermedad, y la aparición de nuevas infecciones. Por eso es muy importante sanear las plantaciones lo antes posible tras la cosecha”, abundan.
En caso de encontrar árboles afectados se debe podar y sanear cuanto antes los árboles afectados, arrancando aquellos que ya no es posible sanear por encontrarse muy afectados. En árboles con ramas o brotes afectados, se debe eliminar mediante poda las partes afectadas con chancros y desinfectar las herramientas de poda de árbol a árbol, limpiando con lejía rebajada al 50% (una parte de agua por una parte de lejía).