El alcalde de Toral de los Vados, Pedro Fernández se jubila de un cargo que lleva ejerciendo casi 25 años. Ha sido alcalde de su pueblo desde el año 2000 y en ese puesto ha visto de todo, pero sobre todo trabajo y el aplauso de su pueblo "es lo que más reconozco, que siempre me hayan votado con mayorías absolutas". Por eso ha sido a ellos, mediante una carta por las redes, a los que primero ha querido dar la noticia que su partida como alcalde -aunque no de la corporación, porque seguirá siendo concejal-.
En su puesto quedará el teniente de alcalde, Alberto Quiroga y asegura que deja un equipo "de gente joven, con ganas de hacer muchas cosas". Las mismas que a él no le han faltado. Asegura que el municipio "ha cambiado mucho" para bien con sus mandatos y eso es de lo que más orgulloso se siente. Sin embargo, asegura que la partida se le hace más dulce después de los enfrentamientos con un partido que es el que le aupó a la alcaldía y que después "no fue honesto", dice "intentando hacer trampas", para que otra persona encabezara la candidatura, sin respetar que él era el alcalde. El vuelco de realidad que le dieron las urnas a su partido, volviendo a confiar en él "con unas siglas independientes que tuvimos que crear en 15 días", considera que debería haber supuesto para el PSOE una reflexión, pero lamenta que no haya sido así. Para él, lo que ha sido es ver el respaldo a su esfuerzo por parte de los suyos, a los que seguirá apoyando "con los mismos valores de solidaridad y de humildad que hemos tenido".
Fernández se va con el sabor amargo de estos últimos años políticamente, pero no a nivel social, donde se siente orgulloso de lo efectuado. Es más, no le quedan proyectos propios que sacar adelante "todo lo pudimos hacer". Deja las cuentas saneadas y se congratula de ello, y un pueblo que ha crecido, aunque le falten "como es la gran desventaja de casi todos", infraestructuras. Las seguirá reclamando a los políticos "de arriba" que se pregunta por qué no hacen nada al respecto. Pero lo hará "más relajado", dejando el bastón de mando a otro a partir del 5 de diciembre.