La Universidad de León cuenta, desde este fin de semana, con dos nuevos equipamientos. Son dos hoteles de insectos realizados a través de los talleres de construcción de hoteles de insectos impartidos en el campus como actividades de voluntariado ambiental.
Se trata de una iniciativa que surgió de la Oficina Verde en colaboración con las Facultades de Biología y la Escuela de Ingeniería Agrícola y Forestal, y ha sido desarrollada por la Asociación El Bierzo Sentido.
Roberto Martínez, divulgador de esta asociación de educación ambiental, realizó dos proyecciones comentadas en estas facultades a las que asistieron sobre 30 personas. En ellas se habló de las distintas familias de artrópodos: Himenopteros abejas y avispas, lepidópteros mariposas y polillas, coleópteros escarabajos y dípteros moscas y sírfidos entre otros insectos que actúan como fauna auxiliar en nuestros cultivos y jardines. Con su acción ejercen funciones de polinizadores y controladores de plagas, beneficiándonos de esta manera con su presencia.
La motivación de estos talleres viene dada por el declive que están sufriendo gran parte de las poblaciones de insectos, causadas, en gran medida por las actuaciones humanas: Intensificación de la agricultura, destrucción o modificación de hábitats, abuso de pesticidas y abonos de síntesis...son las principales causas.
"Es una llamada de atención sobre esta situación alarmante y a la vez informativa de que podemos revertir esta tendencia y cómo hacerlo", explican desde El Bierzo sentido.
Los talleres se completaron con la fase práctica de construcción de sendos hoteles. El primero se instaló en la zona de huertos ecológicos de Agrícolas, y el otro en el Campus de Vegazana entre la facultad de Empresariales y el edificio MIC. Los hoteles reproducen espacios confortables que pueden ser utilizados por diferentes familias de insectos, aunque las más habituales son las abejas y avispas solitarias, que al no tener colonia que defender no se muestran agresivas. Otras especies habituales en estas instalaciones son las mantis, mariquitas, y crisopas. Estos insectos utilizan las instalaciones hoteleras para hacer sus puestas, la mayoría de los insectos son ovíparos y abandonan los huevos tras la puesta. Otro uso frecuente es como refugio de sus predadores, condiciones desfavorables del tiempo o para hibernar.
La mayoría de los materiales utilizados para su fabricación han sido recuperados de la basura. De esta forma se fomentan acciones de bajo impacto en el consumo de recursos y coherentes con las capacidades y necesidades del planeta que habitamos.
Con esta intervención son ya cuatro los hoteles realizados por El Bierzo Sentido en estos últimos meses.