Comienza la sustitución de los problemáticos plataneros en Ponferrada

El Ayuntamiento de Ponferrada, a través de la Concejalía de Medio Ambiente, procederá, a partir del martes,a la plantación de 17 ejemplares de árboles de la especie Ginkgo biloba en la avenida de Avenida de la Libertad.

Estos árboles vienen a sustituir a otros tantos de la especie Plátanus spp, que fueron cortados y extraídos de allí debido a que su sistema radicular alcanza un mayor desarrollo y provoca considerables daños en el pavimento y, en algunos casos, hasta en las cimentaciones de las viviendas aledañas, cosa que no ocurre en el caso del Ginkgo biloba.
El alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón destacó que lo fundamental es que “se está gestionando el arbolado”, algo que no había pasado con anterioridad y que está dando problemas considerables con el levantamiento de múltiples pavimentos. Asegura que por cada árbol que se tenga que eliminar “se plantarán cinco”, de una especie definida. De hecho la Concejalía de Medio Ambiente encargó un estudio sobre el estado de los árboles de la ciudad, tras la caída peligrosa de alguna rama en los parques de la localidad. Ramón asegura que el estudio ya está realizado pero “sus resultados tienen cierta complejidad”. De todos modos, mientras se definen las actuaciones, sí adelanta que se define que algunos ejemplares están en mal estado.

El Ginkgo biloba, que ahora va a ser utilizado, es conocido también como Nogal de Japón o árbol de los 40 escudos. Se trata de un árbol único en el mundo, sin parientes vivos. Existe desde hace 250 millones de años y está considerado como un auténtido fósil viviente.

Su porte es más bien piramidal. Sus hojas caducas y en forma de abanico, son de color verde claro y en otoño toman un hermoso color amarillo dorado.

Este árbol ha generado asimismo una gran literatura e investigación sobre sus muchas propiedades medicinales y con ese fin se cultiva especialmente en Estados Unidos, en Francia y en Corea del Sur.

Como curiosidad, es de destacar que en la primavera de 1946, en Hiroshima, un viejo ejemplar de Ginkgo biloba destruido y seco por la explosión de la bomba atómica comenzó a brotar, considerándose desde entonces a este árbol como un símbolo de renacimiento y un objeto de veneración.

Por otra parte, se ha procedido también, a la sustitución integral de los árboles cortados y erradicados en la calle José Válgoma Suárez durante la ejecución de las obras de renovación integral y de accesibilidad llevadas a cabo en el poblado de MSP del barrio del Temple.

Los ejemplares plantados pertenecen a la variedad Photinia, que en su máximo desarrollo alcanza un tamaño mucho menor que los grandes tilos que fueron talados, siguiendo el proyecto de ejecución de las obras y cuyas dimensiones y sistema radicular afectaban gravemente al pavimento de la calle y a las viviendas, tanto en altura, por su enorme ramaje, como a los cimientos de las mismas.

La Photinia tiene un sistema radicular poco desarrollado y no agresivo. Además, es de hoja perenne y su porte pequeño no interfiere con las fachadas aledañas.