La autorización de construcción del parque fotovoltaico Compas II ha sido denegada, por lo que se pone fin a cuatro años de una lucha que termina de forma satisfactoria. Si bien todavía existe un plazo de un mes para que la promotora pueda registrar un recurso de alzada, la presidenta de Bierzo Aire Limpio, Elena de la Puente, considera que éste no tendría recorrido alguno.
La Junta Vecinal de Otero de Toral, en Toral de los Vados, llevó a cabo acciones judiciales contra el proyecto de la planta ya que consideró que sacrificaría viñedos centenarios desprotegidos. Estaba diseñado sobre los terrenos del antiguo vertedero municipal, ocupando también viñedos particulares, algunos de ellos centenarios, terrenos forestales y las captaciones y canalizaciones de agua potable para suministro del Polígono de Parandones. Así mismo, la línea de evacuación recorrería los términos municipales de Toral de los Vados, Corullón, Villafranca del Bierzo, Cacabelos, Arganza, Sancedo, Cabañas Raras, Ponferrada y Cubillos del Sil.
En las alegaciones presentadas, consideraron que existía un incumplimiento de las condiciones de la Declaración de Impacto Ambiental del proyecto modificado y consideraron, además, que el procedimiento de evaluación de impacto ambiental incurría en omisiones sustanciales ya que no contemplaba, entre otras irregularidades, la existencia del antiguo vertedero que fue clausurado.
El plan Compas II inspiró bajo el lema 'Salvemos nuestro Bierzo' una lucha común para proteger una zona de viñedos antiguos del Bierzo. El presidente de la Junta Vecinal de Otero de Toral, José Modesto Valle, festejó el desenlace de la pelea en compañía de otros actores relevantes: "Esta lucha es un reflejo del compromiso con la transparencia, la justicia y la defensa de los derechos de los vecinos. Nos reunimos aquí para compartir un relato que no es solo nuestro, sino de todos aquellos que creen en la importancia de proteger nuestro entorno, tradiciones y calidad de vida frente a intereses que, a menudo, no representan el bien común".
Siguió la misma línea el empresario José Luis Prada, que se sumó a la reivindicación. "Si lo poco que tenemos en el Bierzo, que es bonito, exportable y que viene la gente a verlo, nos lo destroza gente que no aporta ni trae nada... Las empresas vienen a aprovecharse de la inocencia y la dejadez de los bercianos. ¿Llegan en plan sostenible y tenemos que aceptarlo como si fuéramos tontos? Unirnos a nivel jurídico, como hemos hecho, y con la movilización de todas las asociaciones, ha llevado a que se den cuenta por lo menos de que no nos pueden abandonar ni la Junta ni el Gobierno central. Ya estamos cansados de que vengan a sacar beneficio a costa de nuestro esfuerzo, trabajo y paisajes. Esto no lo vamos a admitir", concluyó con contundencia.