El Comité de Huelga anunció hoy esta decisión después de la celebración de una reunión de la plantilla, en la que se abordó el coste económico que supone para las familias de los trabajadores una huelga de 28 días, así como “las presiones por acusaciones de vandalismo que nada tienen que ver con la realidad”, lo que “obligan a buscar alternativas”.
Unas presiones que, según aseguraron, “probablemente sean provocadas desde la empresa y el Ayuntamiento de León para criminalizar la intachable conducta de la plantilla y del comité de huelga. En este sentido, denunciaron “las malas artes de la empresa y el Ayuntamiento de Ponferrada”, a los que acusaron de “trabajar codo con codo contra los intereses de las 80 familias de El Bierzo para hacer que la huelga quedara prácticamente invisibilizada” por unos servicios mínimos “abusivos”.
Nuevas alternativas
Frente a ello, la plantilla buscará nuevas alternativas para que sus demandas y reivindicaciones “sigan presentes en las calles de Ponferrada”, así como para “desmontar las mentiras y quitar la careta de los que solo actúan movidos por criterios económicos”.
Finalmente, el Comité de Huelga, en nombre de toda la plantilla de FCC, quiso agradecer “las muestras de cariño y solidaridad recibidas desde el primer momento por una gran mayoría de la sociedad”, así como que hayan entendido que el conflicto “se trata de la defensa del mantenimiento de las condiciones dignas para todas las personas que trabajan y trabajen en la limpieza y recogida de residuos de Ponferrada”.