A 1.280 metros de altura, situado en un collado en plena ruta de la Mirada Circular y con dos pequeños valles colindándole, aparece la pieza, que tiene una altura de 2,80 metros, 1,70 de ancho y 0,70 de profundidad. Calonge lleva dos años estudiando la pieza, el primer menhir descubierto en la provincia de León, después de que descubriera una fotografía publicada en el libro “La Peña del Rastro”, sobre el entorno de los Ancares en su parte villafranquina. Reconoce que esa imagen le llevó a pensar en que se podría tratar de una piedra sagrada, algo que ha confirmado con estudios más detallados al lado del estudiante del Grado en Historia de la Universidad de Valladolid, Ernesto Pérez y la colaboración del arqueólogo, Pedro Javier Cruz.
Calonge asegura que el descubrimiento es de calado y ya ha conseguido que el arqueólogo provincial visite la pieza, con el fin de que se inicie un plan de investigación de la misma y su entorno. Incluso apuesta por abrir excavaciones en la zona que definan mejor el pasado que alberga el suelo donde se ubica. Por el momento ya han localizado un castro sin explorar a un kilómetro al este del menhir y cuevas, además de paredes de granito con petroglifos con espirales.
Calonge no descarta que “este lugar pudiera ser algo parecido a un Cromlech” y que esté datado en el neolítico, aunque podría haberse utilizado como lugar de culto hasta la edad media, incluso por la religión cristiana.
Los expertos ahora consideran que el primer paso a dar es “proteger la pieza” para que, en un futuro, pueda ser un lugar turístico que mostrar, en condiciones que no permitan que se altere. Además piden que se continúen las investigaciones para definir mejor un menhir, que, por otro lado, cuenta con algo que le hace peculiar “tiene arte”, dice Calonge sin querer desgranar más. Se refiere a tallas en la piedra granítica con formas humanas y de animales.
Desde el consistorio villafranquino se esperará a que el arqueólogo provincial haga un informe sobre lo que ha visto “porque no podemos tomar ninguna medida hasta que se pronuncie”, dice el regidor de Villafranca, José Manuel Pereira. La piedra se encuentra semioculta por matorrales y el pedáneo de Teixeira, Luis Manuel Gaztelumendi asegura que no se limpiará “porque creemos que de esa forma también se le da protección”.
Se presentará en Zamora
Zamora acogerá a mediados de octubre el I Congreso internacional de paisajes sagrados y será allí donde Calonge quiere presentar el descubrimiento con el fin de “abrir un debate entre los especialistas”, que consiga ir encajando más piezas sobre la pieza. Cruz Sánchez coordina ese evento, en el que considera de especial importancia la asistencia de expertos procedentes de Aragón que cuentan con un catálogo de piedras sagradas “parecidas a la encontrada aquí” y han realizado una ruta turística para conocerla.
Podrían ser los pasos espejo para este menhirque ha aflorado en Teixeira y para el que Calonge pide ya su inclusión oficial en el patrimonio local y la protección, tal vez con una valla “puede que sea un lugar de reunión sagrado y no conozco ninguno con tanto trabajo artístico”, apunta.