Aunque esa era la realidad, el regidor, Olegario Ramón, da por correcta la intervención tras un fin de semana de pullas lanzadas al concejal de Medio Rural, Iván Alonso y la convocatoria urgente de una reunión con él. Tras ella aseguró que quedaba "certificado con el servicio técnico", que la obra se había realizado de manera correcta, puesto que se trataba del asfaltado de 5,5 metros de ancho de calzada, y las conexiones a las viviendas se negociaban con los vecinos que eran los que las costeaban y la empresa "no se hacían con dinero público", dijo el regidor. Reconoce que durante el fin de semana fue difícil contactar con la empresa adjudicataria de ahí que la situación se tensionara "porque queremos aclarar dudas y es una obligación de transparencia la que asumimos".
Y es que esa circunstancia, dada a conocer durante el fin de semana, enervó al alcalde en un primer momento, y de inmediato ordenó la apertura de una investigación sobre la obra de asfaltado de ese vial para conocer “con exactitud si existe realmente alguna irregularidad y, en caso de que así sea, depurar la responsabilidad que de su eventual comisión se derive”.
Se trata de una actuación que se enmarca dentro de las realizadas por la Concejalía de Medio Rural, que lleva CB, socios de gobierno y que “actúa con un amplio margen de autonomía en el seno del equipo municipal”, quiso dejar claro el regidor. Pero, ante esta denuncia, el alcalde pidió explicaciones para depurar responsabilidades sobre este tema ya que asegura que las actuaciones del equipo de gobierno deben ser “impecables” y que no tolerará “comportamientos ni actitudes inadecuadas”.
"Grave falta de comunicación"
Este tirón de orejas antes de preguntar ha molestado a la Concejalía de Medio Rural del Ayuntamiento de Ponferrada que defendió la “correcta ejecución” de la obra y lamentó la "grave falta de comunicación" de Ramón "estoy disponible las 24 horas al día", dijo.Desde la Concejalía que encabeza el edil Iván Alonso dejaron claro que esa obra “responde a acuerdos entre particulares en los que no entró la licitación pública ni el presupuesto público”, algo que fue lo que se comprobó después con los técnicos.
Por eso lamentan que el regidor hablara antes de convocarles ya que consideran que “se habría aclarado perfectamente la cuestión y no hubiera dado lugar a ningún tipo de extrañas controversias sin sentido”. De todos modos, defienden que CB tampoco tolerará “comportamientos ni actitudes inadecuadas”.