La compañía Promining, que asegura ser propietaria de gran parte de los terrenos sobre los que se asienta la antigua explotación minera de la Gran Corta de Fabero, niega que no haya iniciado el proceso de reversión de los terrenos a aquellos propietarios “que así lo soliciten y que hubieran firmado en su día contratos con cláusulas de reversión con las empresas mineras”. Apunta que el proceso se ha iniciado con una comunicación dirigida al Ayuntamiento de Fabero y a los presidentes de las Juntas Vecinales de la zona, “en virtud de la cual se ha dictado un bando que ya está surtiendo sus efectos”. Se les pide a los propietarios de los terrenos copia de los contratos de compraventa sobre los que desean ejercer el derecho de reversión en los que figure como vendedor. “Hasta el momento, se han recibido y contestado solicitudes para la reversión de 27 parcelas”, apuntan, aunque el proceso está abierto.
La devolución se hará efectiva, “tan pronto como finalicen los trabajos de restauración en curso –es decir en 2025- y todo ello de común acuerdo con los vendedores o sus causahabientes, únicos titulares del derecho de reversión, que ni es automático ni obligatorio, por lo que debe ser solicitado por aquellos que se reservaron dicho derecho”, apuntan. Responden así a las acusaciones de los pedáneos de Lillo y de Otero de Naraguantes, que se han quejado de que estas empresas, relacionadas con quien explotó la Gran Corta, Victorino Alonso en su momento, no están realizando las reversiones y están solicitando propiedades mientras que a ellos no se les demandan esa documentación.
Promining considera que se está produciendo “una nueva campaña de desinformación llevada a cabo por la Comunidad Energética de Lillo, cuyos intereses en este asunto son cada vez más evidentes y que no son otros que tratar de boicotear un proyecto de planta solar que se está desarrollando en la zona, para posteriormente tratar de apropiarse del mismo”, apuntan.
Lamentan que se intente enfrentar a los vecinos con la empresa, pero consideran que está claro que son ellos los que obstaculizando un proyecto “y se erigen en portavoces sin serlo y todo ello exclusivamente para el beneficio de esta comunidad energética”.