Uno de los organizadores del evento, Fernando Castedo, resumió las líneas de trabajo en el ámbito desde este Campus. En primer lugar, comentó las actividades de evaluación de la biodiversidad de los sotos del castaño, y destacó que dos de las ponencias que se ofrecerán en las jornadas correrán a cargo de dos alumnos de la Escuela de Ingeniería Agraria Forestal, formados en la comarca. Además, mencionó otro trabajo pendiente que permitirá averiguar si a través de sensores remotos e imágenes de dron, se puede detectar el nivel de afección de avispilla. “Se pensaba que no se podría conseguir nada, pero hay algún resultado esperanzador en este sentido”, afirmó. Asimismo, se marcó el objetivo de “recuperar los sotos tradicionales, pues no se pueden perder porque son un patrimonio cultural e histórico muy importante”, y tendrán que convivir con unas nuevas plantaciones que serán “totalmente distintas”, con riegos y labores más intensivas.
Por su parte, el director general del Instituto Tecnológico Agracio de Castilla y León, Rafael Sáez, aseguró que la castaña del Bierzo tiene “una importancia estratégica por su valor económico y por la biodiversidad, la relevancia paisajística y la tradición que existe en torno al sector”. Desde el Itacyl, aseguró, buscan “potenciar e incrementar esta actividad desde varios puntos de vista: la innovación, la investigación, el análisis sensorial, la comercialización y el aprovechamiento de otros subproductos de la producción de la castaña, además de la promoción”. Sáez cifró en 30 millones de euros la producción media anual de castaña a nivel comarcal teniendo en cuenta las circunstancias climatológicas, las cuales, evidentemente, son variables.
En lo relativo al parque agroalimentario, el director general del Itacyl no quiso aportar una opinión diferente a la explicación aportada por el consejero en las Cortes. “Me remito a su comparecencia y a su respuesta”, aseveró.
El Centro de la Castaña abre en Igüeña
El vicepresidente de la Diputación para el Bierzo y alcalde de Igüeña, Alider Presa, señaló la finalidad que se persigue de promover la producción de castañas con la plantación en 200 hectáreas de terreno ubicadas entre los municipios de Igüeña, Bembibre, Torre, Folgoso, Noceda y Villagatón en terrenos degradados de la minería, en zonas excedentes de concentración parcelaria y en parcelas comunales. "Lo importante es que, además, se promueva también desde la iniciativa privada la adhesión a una misma idea que se convierta en un soto con las mismas características para obtener la misma producción en toda la zona", afirmó. Asimismo, anunció que el Centro Tecnológico de la Castaña abrirá sus puertas en el municipio de Igüeña durante el segundo semestre del año próximo.
Acto seguido, el alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón, defendió que “el castaño es historia y tradición, además de un recurso que tiene problemas importantes como los incendios y el cambio climático”. Defendió que “siempre es más deseable que haya más castaños, pues aportan riqueza desde el punto de vista de la biodiversidad”. A continuación, desveló que los árboles elegidos en el proceso de implantación de riqueza y sostenibilidad en la ciudad van a ser castaños.
Una transformación necesaria
El presidente del Consejo Comarcal de El Bierzo, Gerardo Álvarez Courel, narró los apoyos que se impulsan desde la institución hacia el ámbito. “Dentro de nuestras escasas posiciones económicas, colaboramos con la Mesa del Castaño con una subvención nominativa de 1.500 euros, además de las actuaciones desde el Banco de Tierras para poder recuperar terrenos de castaños que estén abandonados, por el motivo que sea”, explicó.
En cuanto a su visión global sobre el sector, consideró que “el sector primario está bien aprovechado, pero el tamaño de las castañas no es el adecuado”. Por ello, piensa que hay que implementar alguna medida en materia de transformación. “En ese aspecto, nos estamos quedando atrás. Estamos empezando con el recurso de la explotación de la castaña, pero tiene que haber un proceso más amplio como en otras partes de Europa”.
En último lugar, la vicerrectora del Campus de Ponferrada, Pilar Marqués, señaló los procesos de trabajo desde la EIAF en temas de la avispilla, además de en otros aspectos más técnicos. “Al tener aquí un centro y una titulación estrechamente relacionada con el sector, con varios grupos de investigación, dará durabilidad a estas jornadas. No solo es importante iniciar un evento así, sino mantenerlo en una XIII edición”, concluyó.