El colectivo cultural Fala Ceibe do Bierzo demanda ante la Diputación de León la delegación parcial de la materia cultural, en lo que se refiere a la defensa y promoción de la lengua gallega de El Bierzo. Tras las elecciones locales se ha constituido una nueva Diputación de León y el departamento de cultura, incluido el Instituto Leonés de Cultura (con un presupuesto de 5.360.928 euros) ha pasado a ser controlado por un diputado del partido UPL. En este sentido, reconoce la agrupación que “hay fundados temores de que en esta nueva legislatura se continúe con las anteriores políticas provinciales que ignoraron el apoyo institucional a la lengua gallega”. Como ejemplo, la diferencia de trato promocional a la lengua leonesa respecto a la gallega de El Bierzo. “En las revistas de la Diputación, Tierras de León y Feje, no aparece para nada este idioma berciano”, se queja.
Abunda que “el partido de la UPL se ha mostrado siempre muy contrario a la protección de la lengua gallega, por considerarla ajena a la cultura leonesa”. Pero recuerda que el Estatuto de Autonomía de Castilla y León reconoce expresamente que “gozará de respeto y protección la lengua gallega en los lugares en que habitualmente se utilicen” (art. 5.3), “por supuesto, nadie discute que en El Bierzo se habla gallego por parte de su población”. La Ley de la Comarca del Bierzo también hace referencia a este idioma, con el mismo texto en su artículo 1.4, “luego esta institución tiene un mandato legal para intervenir en materia lingüística”, asegura.
Esta Ley de la Comarca (2010) indica que “la Diputación provincial de León podrá delegar en la Comarca del Bierzo las funciones que tuviera atribuidas por el ordenamiento jurídico, con las limitaciones establecidas en la legislación básica estatal, previo acuerdo de aceptación del Consejo Comarcal (…)” (art. 9.1). Por eso “ demandamos la delegación de la materia cultural, en lo que se refiere a la protección y protección de la lengua gallega del Bierzo. Fundamentamos esta iniciativa cultural en los criterios de descentralización, cercanía a los ciudadanos bercianos galegofalantes, eficacia de la administración más próxima y eficiencia de gestión para evitar duplicidades administrativas”.