"FCC y Ayuntamiento intentan engañar a la ciudadanía, y lo están consiguiendo"

En el camino hacia el cumplimiento de un mes de huelga de los trabajadores del servicio de recogida de residuos sólidos urbanos y limpieza viaria, continúa sin haber ningún avance que desbloquee una situación que continúa igual de enquistada que el primer día de movilización. Tal y como comenta el presidente del comité de empresa, Javier Gómez, ni FCC ni el Ayuntamiento de Ponferrada han movido ficha, por lo que las piezas sobre el tablero se mantienen en las mismas posiciones a la par que el espíritu de resistencia de los huelguistas permanece intacto, según asegura.

Durante las últimas semanas, éstos han realizado una serie de escraches a los actos del alcalde Olegario Ramón para exigirle que ejerza de mediador e inste a la empresa a ceder. Pancartas, camisetas personalizadas, megáfonos y altavoces han sido el equipamiento de las decenas de empleados que acusan al regidor de ser "el candidato de FCC a la Alcaldía". Asimismo, en las últimas fechas también han decidido concentrarse frente a la Casa Consistorial desde las 9:00 hasta las 14:00 horas, donde señalan que la Policía Municipal les ha sacado fotos "que dicen que les han pedido desde el Ayuntamiento".

Sobre los agentes, los huelguistas también apuntan que les continúan realizando controles y seguimientos exhaustivos ante cada movimiento que realizan. Además, añaden "una cosa ilógica": que un inspector del servicio de medio ambiente escolta a los camiones de la basura durante horas por la noche. "Este trabajador incluso ha reparado el camión. Un día se desconfiguró, y la empresa concesionaria proporcionó unos parámetros para repararlo porque no funcionaba. Fue este empleado del Ayuntamiento", dice. Además, señala nuevamente el "esquirolaje" de la empresa y del Ayuntamiento, lo que "por desgracia, hace que no se visibilice la huelga".

Por otro lado, acerca de que el alcalde resumiera en fechas recientes los salarios de los trabajadores y los detalles del acuerdo que firmó el Sindicato Comisiones Obreras, considera que "es una auténtica vergüenza que tenga la misma estrategia de engaño que la empresa". "Nosotros no cobramos 40.000 euros, eso es falso completamente. Ellos intentan engañar a la ciudadanía y creo que, por desgracia, lo están consiguiendo. Sólo queremos un convenio para que nuestros derechos no se acaben perdiendo en el tiempo", apunta.

Gómez comenta que los trabajadores subrogados, a día de hoy, cuentan con estos derechos, pero los trabajadores que entran nuevos, no. "Estamos hablando de 200-300 euros de diferencia de salario", subraya. Esta circunstancia afecta en torno a un 14% de la plantilla, si bien la cifra, con las prejubilaciones venideras, seguirá creciendo. "El tema es que estemos todos legislados por el mismo convenio", asevera.