El IEB resolverá la deuda con sus tres empleados este año

Espera volver a la normalidad desde la deuda que casi lo consume al repunte, si consigue que el último varapalo de la devolución de una subvención de 35.800 euros otorgada a la anterior directiva no se abone

07/01/2025
 Actualizado a 07/01/2025
Presentación de una de las revistas en el IEB. | M.I.
Presentación de una de las revistas en el IEB. | M.I.

Tras un último trimestre de año de remangarse para seguir remando y retar a una deuda que le ahogaba, el Instituto de Estudios Bercianos, IEB, ha vuelto a la vida "y a recuperar el prestigio que estaba perdiendo", dice la actual presidenta de la gestora que se ha hecho cargo de él, Mar Palacio, a finales de 2023. Ella había sido presidenta con anterioridad y había conseguido relevo en 2020, pero el IEB fue dejando sus cuentas caer hasta el punto de no pagar a sus empleados, que habían llegado a los juzgados para reclamar sus nóminas. La nueva gestora consiguió acordar con ellos ir abonando esos impagos en tres años, y así no judicializar el caso, y lo han hecho con creces "no llegaremos a los 3 años que acordamos. Nos quedan por pagar 5.000 euros", dice Palacio "y este año ya se abonarán". Se cierra así el capítulo que más lamentaba, por tener que ver con trabajadores. En la actualidad, el IEB solo cuenta con un empleado y ha conseguido recuperar la actividad, tras un año de pelea, a partir de octubre "teníamos que hacer la actividad por la que habíamos obtenido subvenciones", explica. Eso les ha hecho acabar el 2024 "muy cansados" pero también satisfechos de haber podido ver la luz.

Heredaron de la anterior junta directiva una deuda casi inasumible, de 85.000 euros, y hoy solo tienen que abonar esos 5.000 euros a los empleados. Por el camino, multitud de actos solidarios que Palacio agradece "todos los socios y la sociedad en general se ha volcado con el Instituto y esperamos que sigan haciéndolo", dice. Socios de honor como la compañía de Teatro Conde Gatón, o la Banda de Música Ciudad de Ponferrada, o ayuntamientos que han promovido colectas entre sus funcionarios...han servido de arrope a un instituto que se siente querido. Incluso ha conseguido repuntar en el número de socios que fue mermando hasta los 530. Ahora vuelven a lucir unos 630. Aunque ha habido fallecimientos que el IEB llora, ha habido también incorporaciones de jóvenes que quieren dar continuidad al proyecto, algo que satisface a Palacio.

En el pero, sin embargo, después de estar inmersos en la pelea por subsistir, llegó al IEB una reclamación de la Junta pidiendo la devolución de una subvención de 35.800 euros "ahora será algo más, por los intereses", por problemas en su justificación. 

El IEB requirió a la anterior junta directiva el abono de esa cuantía, al tiempo que presentó alegaciones a la Junta. En ambos casos, no se ha resuelto nada y el IEB vive "un impás" para saber si puede repuntar desde una deuda que ha conseguido rebajar en tiempo récord, o que tiene que volver a ponerse en la lucha para abonarla de alguna manera. "Esperamos que nos la minimicen para poderle hacer frente", dice Palacio, sin muchas esperanzas de recuperar ese dinero de la anterior directiva. De todos modos, tras lo vivido, asegura que será un camino más llevadero que el acometido. 

Siente la fuerza de los socios, que han empujado al instituto en el que ha sido uno de sus peores momentos y eso le hace afrontar el 2025 "con ilusión y con cosas pendientes". Aunque pensaban convocar elecciones ya este mes para pasar de la gestora a una junta directiva oficial, asegura que, no haber resuelto ese problema que podría ser una nueva deuda, les hace no pensar en eso "nadie va a querer presidir un instituto con deuda. Nos comprometimos a coger las riendas para resolver el problema y es lo que vamos a hacer", dice comprometida. Le empuja también el poder desarrollar actividades desde enero, no como el año pasado, que hasta septiembre no pudieron remontar para realizarlas. Eso le hace esperar "tranquilidad" en el nuevo año "con muchos proyectos y habrá que ver cuáles podemos abordar y cómo podemos organizarnos".

Espera que este último varapalo de la solicitud de devolución de la ayuda de la Junta no se repita "aunque no pongo la mano en el fuego" y el IEB recupere su normalidad. Por el momento, lo que se plantea pasado Reyes es dar a conocer el fallo Premio de investigación Antonio Estévez. Adelanta que es una investigadora la ganadora, por primera vez una mujer, y eso también sirve de estímulo para seguir. "Creo que nuestro futuro es esperanzador", resume Palacio, esperando que este 2025 sobre todo, permita recuperar la normalidad de un IEB señero, que se ha mantenido desde su creación en 1989.

Ahora estudia entrevistarse con posibles patronos que puedan hacer más llevadera la carga económica de un instituto formado por voluntarios que buscan que la cultura comarcal tenga su espacio.

 

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