La Calleja de otros siglos

Vega de Espinareda no se escapa a las celebraciones de moda. Así, vuelve a preparar una edición más de su fiesta medieval, en la que la actividad principal es el mercado artesano. Las celebraciones son el sábado día 20.

Un mercado que ambienta la calle La Calleja con las guirnaldas y estandartes de hace muchos siglos, transportando a la Edad a Media a todos los mercaderes y compradores que se zambullen en el Medievo una feria cargada de actividades complementarias para el entretenimiento de los visitantes y vecinos.

A partir de las 17:00 horas se abren los puestos con los comerciantes ataviados con atuendos medievales. La organización anima a los clientes a que se sumen también a vestirse de época para crear un ambiente festivo temático.

Así, no será difícil encontrarse con damas, caballeros, monjes, titiriteros o pillastres por La Calleja visitando las tiendas ambulantes deproductos artesanos y gastronómicos. Podrán comprar miel, quesos, mermeladas y otras conservas dulces y saladas de productos gastronómicos de la zona. Embutidos, pan y dulces. También artesanía de otro tipo, tanto textil, como decorativa, madera, cuero, cerámica y miles de objetos más que estaban de moda en la Edad Media y que lo siguen estando ahora.

El gran ambiente que cada día inunda la playa fluvial de Vega de Espinareda ss trasladará ahora a las calles aledañas para disfrutar de esta fiesta que además estArá animadas con actividades.
Antonio El Arguero propone a lo largo del mercado varios juegos y entretenimientos para los clientes.Habrá un taller de barro para niños y una exHibición de aves rapaces a cargo de Medieval Falcons Núcleo zoológico.

Hasta la noche se estirará el mercado para dar pie a un espectáculo teatral. Será a las 22:30, con la representaciónde la obra ‘Una noche de primavera sin sueño’, una adaptación de una obra de Enrique Jardiel Poncela. Es el grupo Vegandrés el encargado de ponerla en marcha.

Y finalizará la fiesta con la actuación musical del trío Vivarium.
Vega no sale de una fiesta y ya entra en otra, ya que acaba de celebrar a su patrona, El Carmen. Así, la villa es un foco de atracción continua para los disfrutones estivales.