La Fundación Biblioteca Enrique Gil anunció hoy la finalización de la primera fase de los trabajos de limpieza y desescombro de la Casa Gil iniciados el pasado mes de junio y que han consistido en el desbroce y desescombro de la zona no protegida (la antigua huerta familiar y futuro jardín), con un coste de cuatro mil euros, que han sido sufragados por suscripción popular.
Tras dos meses de trabajo, se completa así la primera fase de los trabajos, el desbroce, desescombro y limpieza de la antigua huerta de la casa natal de Enrique Gil y Carrasco en la calle del Agua. “Se han retirado cinco contenedores de basura y restos vegetales acumulados durante doscientos años de abandono. Este es el primer paso para crear el futuro Jardín Romántico del Bierzo”, apunta el presidente de la Fundación, Valentín Carrera.
“Damos las gracias a todos los mecenas que han hecho su aportación a la campaña para salvar la Casa Gil”, expresa la Fundación Biblioteca Enrique Gil, y anima a todos los villafranquinos y bercianos a seguir colaborando. El próximo paso será estudiar y planificar el futuro Jardín Romántico del Bierzo que será diseñado empleando, principalmente, especies autóctonas bercianas, que permitan crear un pequeño ecosistema sostenible con el mínimo coste.
En paralelo al Jardín Romántico del Bierzo, la Fundación ha encomendado a la arquitecta villafranquina, Paula Núñez, la redacción del proyecto básico para la “Consolidación de la Casa Gil”, es decir, la actuación urgente de consolidación que permita asegurar, proteger y conservar los elementos constructivos protegidos (la fachada blasonada a la calle del Agua, los muros y paramentos y demás restos que se mantienen en pie). El proyecto será presentado en septiembre ante la Comisión de Patrimonio de la Junta de Castilla y León, pues esta parte del edificio goza de protección integral como Bien de Interés Cultural, y está también doblemente afectada como Camino de Santiago.
La Fundación Biblioteca Gil y Carrasco ha dado la voz de alarma sobre la situación de ruina que vive la casa del autor romántico en Villafranca del Bierzo y que pretende salvar con la campaña de mecenazgo social y urgente para que esa edificación pueda pasar de ruina a jardín romántico.
“Esta es una llamada urgente a todos los villafranquinos, a todos los bercianos para acudir en auxilio de la casa natal del poeta Enrique Gil y poner en marcha el futuro Jardín Romántico”, afirma la Fundación Biblioteca Enrique Gil. Una llamada con la que ya ha conseguido ir dando los primeros pasos y salvar la Casa Gil de la ruina en la que está, tras doscientos años de completo abandono.
En concreto, el proyecto se propone restaurar la casa familiar del autor de El Señor de Bembibre, en la calle del Agua de Villafranca, en el Camino de Santiago. Para ello, la Fundación ha adquirido el solar natal de Gil al que ha sumado la parcela contigua, donada por el Ayuntamiento de Villafranca, para hacer posible un ambicioso objetivo a medio plazo (2024-2028), en cuyo proyecto arquitectónico y cultural ya han empezado a trabajar.
“Tras doscientos años de abandono”, explica el presidente de la Fundación, Valentín Carrera, el edificio necesita una actuación urgente de consolidación. Se ha efectuado el desbroce vegetal, conservando los elementos constructivos protegidos. Parfa continuar con los trabajos, la campaña se propone recaudar 100.000 euros antes de finalizar este año, “lo que permitirá asegurar todos los elementos protegidos, redactar el proyecto arquitectónico y poner en marcha el Jardín Romántico”. “Todas las ayudas, generosas o modestas, son bienvenidas. Sumando grano a grano conseguiremos multiplicar nuestra ilusión y hacerla realidad”.
La acción de dirige a donantes particulares, empresas e instituciones; al ser la Fundación una entidad de interés público, sin ánimo de lucro, las donaciones gozan de desgravación en el IRPF (el 80% en los primeros 150€ y 35% en el caso de empresas. La campaña puede visitarse en enlace https://casagil.helpbysc.com/ o mediante aportación directa en la c/c de la Fundación (ES9520800314333040033503).
“Necesitamos la ayuda de todos los mecenas que sientan en su alma romántica que El Bierzo, y muy especialmente Villafranca, tienen una deuda pendiente con Enrique Gil”.