El primer encuentro entre representantes del Camino de Invierno a Santiago y del Camino de San Olav, en Noruega escogió el castillo de los Templarios como escenario para poner en valor las rutas de peregrinación como un sistema abierto contra la despoblación rural, dijo la alcaldesa anfitriona Gloria Fernández Merayo.
La regidora subrayó el ejemplo de experiencias de crecimiento al lado de las rutas hacia Santiago en la constitución de la agrupación de municipios por los que pasa la vertiente del Camino de Invierno. Esa unidad es la que se traslada también a Noruega, un país al que la regidora agradeció su aportación para acometer una reforma en la fortaleza templaria, que se ha dado en llamar sala Noruega para materializar ese agradecimiento.
El Camino de Santiago se abre desde dos vertientes en Ponferrada, por un lado la rama del camino francés y por otro el de invierno, algo que, curiosamente, se repite con el Camino de Olav, recuerda la concejala de Cultura y Turismo, María Antonia Gancedo. Esta ruta escandinava de peregrinación nace en el siglo XI, tras la muerte del santo considerado patrón de Noruega. A lo largo de 650 kilómetros, que en gran parte transcurren por la costa, la ruta une Oslo, la capital del país, con la catedral de Nidaros, en la ciudad de Trondheim.
Es un recorrido que aún busca obtener el reconocimiento oficial de las autoridades, según explicó la directora de Patrimonio Cultural en Oslo, Aase Bitustoel, algo que también le hace ser similar al de Invierno, en la misma lucha en la actualidad, de su parte berciana.
La recuperación del recorrido por la costa, que nació en 2011, es según Bitustoel “una manera de hacer que la gente de los pueblos disponga de ingresos para que esos sitios puedan volver a tener vida”. Una de las asignaturas pendientes es conseguir la unidad de municipios de la que quieren aprender del Camino de Invierno. Según el director de marketing de la oficina de turismo de Noruega en España, Luca Bocci, esa forma de colaboración entre pequeñas comunidades es un ejemplo que no se ha conseguido en Noruega, sobre todo porque “no sabemos quién tiene que hacerlo”, dijo, a la espera de resolver dudas con este encuentro. Pero además espera que se comiencen a establecer acciones conjuntas con la comarca sobre estos caminos para enriquecerse mutuamente.
Como símbolo de la unidad entre pueblos, el director del centro de peregrinos del valle de Gudbrandsdalen, Per Gunnar Hagelien, regaló a la alcaldesa de la ciudad un vaso de cristal encontrado en unas excavaciones arqueológicas en la zona del Camino de San Olav.
Los caminos peregrinos, un método contra la despoblación
El Camino de San Olav y el de Invierno se retroalimentan en el primer encuentro de ambos en Ponferrada
06/11/2018
Actualizado a
11/09/2019
Lo más leído