Los de Folgoso pueden atravesar muros

Folgoso de la Ribera tendrá la sensación de poder traspasar alguno de sus muros. Paredes de edificios que están siendo decoradas con ‘trampantojos’, por los artistas Asier Vera y Víctor MÜS. En ellas se crean ilusiones ópticas y profundidades de campo irreales sobre superficies planas que llaman mucho la atención y conforman divertidas estampas.

El alcalde Tomás Vega apunta que los muros “se ven influenciados por la incidencia de la luz, de modo que varía su apreciación en distintos momentos del día, y que hay que mirarlos desde el ángulo correcto”.

Uno de ellos está ya terminado y ha convertido la pantalla principal del pabellón de deportes de Santamadora en un elemento más del paisaje, porque la pared es ahora un río profundo con sus árboles, rocas, montañas, veredas… De este modo, explica, se intenta “paliar un poco la polémica” que siempre ha rodeado al edificio, de hade haber roto con la sintonía del paisaje.

Esta obra incluye una cámara oculta vía Internet “por si se produjera un acto de vandalismo”, dice Vega.En el pabellón, además de este cambio de imagen, en las próximas semanas se hará una reforma en el interior para subdividirlo mediante lonas mecanizadas, y así poder acoger confortablemente grandes eventos, como es el caso de la fiestas del botillo. Es una obra de alrededor de 20.000 euros,una de las mayores que quedan pendientes de ejecutar de los proyectos de esta legislatura.

En estos días se está realizando el segundo de los murales ‘trampantojos’ de Folgoso, en el edificio de las escuelas, sobre el que Tomás Vega desvela ya alguna pista, como que tendrá un tono más infantil, se observará una una pared que parece rota, una puerta que simula estar entreabierta… y más sorpresas. Las escuelas también tendrán mejoras próximas, como es el caso de del interior del bloque y una rampa de accesibilidad al patio en la de Folgoso, así comoy nuevas puertas en las escuelas de La Ribera.

Los trampantojos son “algo que ya tenía pensado desde hace años", dice el alcalde “me encantan, y creo que pueden ser un reclamo turístico” para el pueblo.