Mejorar el agua en Kilela Balanda, objetivo de la marcha solidaria de Ponferrada

Cáritas y el Consistorio se dan la mano para conseguir el importe que supone la instalación de una bomba solar para agua potable en esta zona africana

Mar Iglesias González
14/10/2022
 Actualizado a 14/10/2022
Los niños de Kilela en medio de los bidones con los que cada día cogen agua.
Los niños de Kilela en medio de los bidones con los que cada día cogen agua.
Ponferrada convoca su marcha solidaria este 16 de octubre, con el fin de recaudar fondos para la instalación de una bomba solar para agua potable en Ngalu, Kilela Balanda (Congo). Se trata de un proyecto que va de la mano del Ayuntamiento de Ponferrada y de Cáritas Diocesana de Astorga que beneficiará a 2.900 habitantes. Se necesitan 11.000 euros, según explicó el encargado de la cooperación internacional de Cáritas, Florentino García. Por el momento ya hay 500 personas apuntadas, por lo que confía en que este proyecto pueda realizarse en tiempo en forma. García lleva desde 1964 trabajando en esta zona africana donde asegura que el problema del agua y el de poder escolarizar a los niños es acuciante, algo que ha comenzado a cambiar gracias al trabajo solidario, abunda. 

Las inscripciones están abiertas, al precio de 10 euros para mayores de 16 años, en la web marchasolidaria.ponferrada.org , en donde además se detalla el recorrido, que parte a las 10: 30 horas de la Plaza del Ayuntamiento y discurre por Campo -en principio estaba previsto hacerlo por la senda del Pajariel hasta Toral de Merayo, y vuelta otra vez a Ponferrada, pero los avistamientos del oso han hecho que se tenga que repensar-. 

En Kilela Balanda el agua no llega desde una tubería a las casas, sino que lo hace en un bidón amarillo de 20 litros portado por pies femeninos. Para conseguir los 100 litros diarios que consume una familia es necesario hacer cada día 5 viajes hasta el manantial, o hasta la charca, a una distancia que va desde los 700-900 metros a los 7-9 kilómetros y con la duda de si el agua será apta para ser consumida. En la zona rural de la República Democrática del Congo la población se ve obligada a consumir las aguas de superficie, frecuentemente insalubres y sin tratamiento alguno.

Cada mes mueren en el hospital de Kilela una media de 4 niños menores de 5 años víctimas del paludismo y la diarrea, combinados con una grave subalimentación. Cáritas Diocesana de Astorga trabaja en un programa de acondicionamiento de manantiales desde el año 2012 que incluye la instalación de bombas solares allí donde el caudal del manantial lo permite. Para que el consumo sea saludable se necesita hacer una captación y asilamiento del manantial que incluye la construcción de una piscina cubierta de 25 m3 para bombear el agua.

También, excavar 900 metros de zanjas. Así como colocar tubos y cisternas en la red de distribución. “Construiremos además 4 fuentes públicas con lavadero y sistema de evacuación para cada fuente, así como paneles solares para el funcionamiento de la bomba solar. Por ello, necesitamos adquirir paneles solares, una bomba solar, tubos y accesorios y 2 cisternas de pvc de 5.000 litros cada una”, explican. Cáritas prevé comprar el equipo de bombeo en el mes de noviembre yfinalizar la instalación en abril de 2023.
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