El Grupo Municipal Socialista de Ponferrada manifiesta su "profunda preocupación y descontento" por la situación de las piscinas climatizadas del complejo Lydia Valentín, cerradas desde septiembre de 2023. De hecho, comienza a sospechar que "no existe voluntad política" para acometer la obra en el corto plazo y que se aplazará a la antesala de las próximas elecciones municipales "como medida electoralista".
El concejal de Deportes en el mandato anterior, Ivan Castrillo -Koseki-, reprocha que, "pese a las promesas del Partido Popular y de la Junta de Castilla y León de acometer la inversión necesaria para la reapertura de estas piscinas, a día de hoy no conocemos ni el proyecto concreto ni una memoria valorada que permita conocer el alcance de las obras", y eso que lo ha solicitado hasta en cinco ocasiones sin éxito.
Por esta demora, el socialista afea una doble manera de proceder del equipo de gobierno: "para las obras que les interesa, el proyecto se hace y se presenta en un tiempo récord -sirva como ejemplos el proyecto de semipeatonalización de la avenida del Castillo o el del mirador de la torre de la Basílica de La Encina- y, sin embargo, para una actuación que sí que repercute directamente en la ciudadanía, el proyecto ni está ni se le espera. El gobierno de Morala empieza a ser el de muchas promesas y ninguna solución", añade.
La ausencia de plazos y de una hoja de ruta definida, a juicio de Castrillo, "evidencia la falta de compromiso del PP con las necesidades de los ciudadanos de Ponferrada. Este incumplimiento afecta directamente a los usuarios que se ven obligados a desplazarse a la única piscina operativa, cuyas limitaciones en capacidad y horarios no cubren la demanda existente".
Además, indica el desconocimiento sobre el coste que tendrá esta actuación, por lo que opina que "deberían explicar a la ciudadanía por qué una obra que los técnicos municipales valoraban en 540.000 euros y que en septiembre de 2023 calificaban de urgente, ahora el alcalde Marco Morala ha elevado a 2,5 millones de euros, una cantidad que multiplica por cinco la inicialmente estimada". Para el exconcejal de Deportes, "este baile de cifras también empieza a ser algo normal en los anuncios de inversiones que hacen desde este equipo de gobierno".