Aunque Merayo no se marca como una prioridad ese regreso, sí asegura que será la asamblea la que lo decida. Quiere dar voz a los militantes, algo que reprocha que no se está haciendo hasta ahora. Recuerda que en las elecciones municipales últimas, en las que hubo un amplio pastel de votos a repartir, y que finalmente dio el gobierno al PP, los resultados del PSOE en Ponferrada daban la posibilidad de gobierno y reprocha que en aquel momento «la dirección local no supo o no quiso gestionar adecuadamente»esos resultados.
De hecho asegura que hay un grupo de militantes que «no se explican» cómo habiendo mayoría de concejales de izquierdas en Ponferrada sigue gobernando el PP. Una apuesta velada por la moción de censura, aunque no de manera abierta. Lo que sí reprocha a la política de la ejecutiva es que no se haya dado cumplimiento a las reuniones de las asambleas como marcan los estatutos, cada seis meses, ni con las reuniones de gestión, una vez al año. También es crítico con el equipo local en el Ayuntamiento de Ponferrada, que tampoco ha presentado sus balances anuales a la asamblea. «Se está negando el debate interno en la agrupación y a la militancia la participación y la toma de decisiones de la asamblea», reprochó, algo que pretende que vuelva. El movimiento de la ejecutiva «es de mínima expresión». Un día a día «demasiado vacío» para un municipio como Ponferrada, de más de 60.000 habitantes, dice.
Contra la dirección
«Ya sabéis todos lo que hay». Así iniciaba Merayo la presentación de su candidatura, al lado de históricos y de caras nuevas y justificando su decisión en la unidad de «un grupo de compañeros que no están de acuerdo con las decisiones tomadas por la dirección del partido». Merayo presentó la lista al lado del histórico José Álvarez de Paz, Susana Álvarez, vicesecretaria comarcal, Laura Girón, miembro de la ejecutiva, Ángela Marqués y Alberto Rodríguez Blanco, ambos concejales en la actualidad en Ponferrada -al lado del otro candidato, Olegario Ramón- y Eugenio Arias, que fue representante vecinal de Fuentesnuevas. Con esos compañeros busca «equilibrio, experiencia pero también gente joven para que den relevo, unidos y con capacidad integradora, porque no sobra nadie, y con lealtad a los objetivos del partido. Debe ser un equipo con democracia interna y que haya debate interno. Las decisiones importantes deben tomarse por todos los afiliados», apostó. El verbo «sumar» se desplegó al mirar al futuro, sin rencores y apoyando en su trabajo al equipo de concejales que representan al partido en Ponferrada. «El principal adversario del PSOE es el PP y debemos recuperar la opinión ciudadana», dijo. «El PSOE debe abanderar la oposición y mejorar la política, siguiendo el dictado de la asamblea», reiteró y, a partir de ahí, hacerse con el gobierno de Ponferrada, después con la Diputación provincial y la Junta.
Dos ediles con Merayo
Ángela Marqués y Alberto Rodríguez, ediles del equipo municipal del PSOE en Ponferrada, forman parte de la candidatura de Merayo, pese a que la primera en formalizarse fue la del portavoz del grupo del que forman parte, Olegario Ramón. Aunque consideran que esta decisión no va en contra de su trabajo ni tiene por qué dar lugar a ningún tipo de movimiento de sillas. De hecho considera Merayo que se puede abrir una vía de diálogo con el equipo de gobierno «las decisiones que se tomen deben ser para sumar». El primero en postularse a candidato de la local fue el portavoz del grupo Olegario Ramón quien consideró que tener más opciones es producto del «sistema de actuación democrática y los militantes están en su derecho de acceder a la gestión orgánica de la organización», expresó.