Reprochan a Ramón que adquiera buses urbanos de gasóleo mientras promulga una ciudad 'verde'

El grupo municipal de USE Bierzo en el Ayuntamiento de Ponferrada advierte de la  situación ruinosa a la que llevará al Ayuntamiento de Ponferrada el nuevo contrato del servicio de autobuses y de la caída radical del número de pasajeros del servicio. Unos datos que le hacen a este partido prever inmediatos recortes en la prestación, con supresión de líneas y paradas. 

La formación  que dirige Samuel Folgueral alerta de que el transporte urbano pasará a costar alrededor de un millón de euros más cada año a las arcas municipales, como ya habían advertido, con el nuevo contrato aprobado por el pleno municipal el pasado mes de noviembre. Pero es que además, afirman que se ha producido una reducción de hasta el 75 por ciento en el número de usuarios causada por la crisis sanitaria. Y que precisamente, el Ayuntamiento recibirá como beneficio anual únicamente el pago de los billetes, mientras entrega a la empresa 2,5 millones anuales por la prestación del servicio.

En un comunicado de prensa, los responsables de USE calculan, de este modo, que una vez descontado lo recaudado por los billetes, que cifran en 200.000 euros, el Consistorio puede verse abocado a afrontar un pago de 2,3 millones, “hasta un millón más de lo que se estaba pagando por el servicio tal y como estaba mediante el sistema de déficit de explotación”, explica Folgueral, sean cuales sean las circunstancias del año "llueva o truene", dicen..

Además, Folgueral critica que los cuatro autobuses adquiridos por el Ayuntamiento en septiembre del año pasado comiencen a operar con al menos dos meses de retraso, lo que facultaría  al Ayuntamiento a recibir una indemnización de más de 60.000 euros. Pero además, a Folgueral le resulta especialmente llamativo que  los cuatro nuevos vehículos adquiridos por el Ayuntamiento funcionen con motor de gasóleo mientras el alcalde,  Olegario Ramón, que haga "propaganda" sobre una ciudad verde y sostenible, cuando existen en el mercado otro tipo de vehículos menos contaminantes que darían coherencia, al menos, a la idea que trata de promulgar el equipo de gobierno sobre planificar una ciudad más limpia con su proyecto de Smart City.

El exalcalde y portavoz de USE recordó que los servicios técnicos municipales advirtieron en un informe de que esa adjudicación se llevó a cabo “con baja temeraria” y sin que la empresa beneficiada acreditase que cumple con los parámetros de calidad de fabricación.