El consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones ratificó que, en el primer trimestre de 2025 comenzarán las obras de ampliación en el polígono del Bayo con una nueva fase que incluye la depuradora. Una inversión aprobada por la Junta y que supera los 20 millones de euros. El consejero asegura que también se está tratando con el alcalde de la localidad de Cubillos del Sil un nuevo acceso al polígono, una obra al que le faltan flecos para poder realizarla. El Bayo para el consejero es la referencia económica del Bierzo pero no la única. De hecho apuntó que se ha reunido ya con el alcalde de Ponferrada, Marco Morala para tratar sobre la puesta en marcha de las obras de mejora del acceso al polígono de La Llanada, en Santo Tomás de las Ollas, un proyecto "sin cuantificar", dijo el consejero y que debe pulirse en próximas fechas al lado de los empresarios afectados.La Llanada se incluiría en el proyecto de la Junta de polígonos industriales.
Para Morala "es una buena noticia que se vaya acabando el suelo industrial previsto alrededor de Ponferrada porque se vayan instalando nuevas industrias, pero a su vez eso requiere una labor proactiva de anticipación como este programa de suelo industrial puesto en marcha por la Comunidad Autónoma con una inversión multimillonaria". Considera que esta noticia "debería venir acompañada por inversiones equivalentes del Gobierno de la Nación en otras infraestructuras que las industrias tienen muy en cuenta a la hora de decidir su ubicación, como ocurre con las infraestructuras viarias y ferroviarias, las infraestructuras energéticas y las de las tecnologías de la comunicación".
Suárez-Quiñones aprovechó su visita a Ponferrada para participar en un foro sobre industrialización, para volver a pedir al Gobierno que cumpla su compromiso de ayudar con 47 millones a la vidriera TVITEC para la puesta en marcha de un nuevo horno. Lamenta que dos años después de sellar el compromiso de esa inversión, esta no se haya realizado. pero sobre todo manifestó su preocupación porque no se haga "no sabemos nada. Parece que hay que empezar de cero", lamentó.
El consejero dio su apoyo a los empleados de Emobi e Ibermon, las dos empresas en proceso concursal que están definiendo su futuro. Suárez-Quiñones quiso lanzar un mensaje de tranquilidad para los empleados, ya que asegura que sus puestos de trabajo quedarán a salvo.