"CB y PP tienen que saber que suman 12" y necesitan 13 para gobernar, recordó la portavoz del Grupo municipal de Vox en el Ayuntamiento de Ponferrada, Patricia González, tras la ruptura del pacto "de gobierno", dice, que no de investidura, como se ha venido subrayando todo el mandato por parte del equipo de Gobierno, con el PP, ya que asegura que todos estos meses han trabajado desde dentro, aceptando la confección de unos institutos independientes y autónomos, en las carteras de Cultura y FormaciónEmpleo.
Ahora, asegura González que los servicios jurídicos han trasladado la imposibilidad de crear esos órganos "porque hay un Plan de Ajuste y no se podrían hacer hasta 2028". Pese a que Coalición por El Bierzo niega que esos informes tengan esa interpretación y mantenga ese camino abierto, que fue el pactado, Vox se atiene a la legalidad y pasa ahora a pedir concejalías en lugar de institutos. Las solicita en las mismas carteras, aunque, asegura González, que tienen "la mano tendida" y la puerta abierta a renegociar "desde cero". La base, no obstante, no bajaría de que fueran concejales, integrados en el equipo de Gobierno "porque si nos dan las delegaciones nos dan las concejalías", dice, eliminando la vuelta que PP y CB quieren dar a la entrega de delegaciones de servicios y no de competencias.
"CB debe plantearse el apoyo que necesitan", pide González que defiende la lealtad de los miembros de Vox, tras pactar dos institutos que no se han creado aún "pero hemos trabajado todo este tiempo en sus estatutos" y en su planificación, pese a que ahora se compruebe que, como dijo el PSOE desde el inicio, no se puedan crear "el PSOE dice muchas mentiras, por eso no le damos credibilidad", dice, pero ahora, tras lo ocurrido, "no sé quien miente, si CB o PP". Lo que tiene claro es que les necesitan para seguir gobernando y que la pretensión de Vox es impedir la escalada del PSOE al Ayuntamiento, por lo que "estamos dispuestos a renegociar" incluso las áreas que puedan encabezar.
La portavoz del Grupo municipal de Vox en el Ayuntamiento de Ponferrada, Patricia González, acompañada por el otro edil de la formación, Gerardo González, comparecieron ante la prensa para hablar de lo ocurrido en las última horas, después de que, al ver que legalmente no podrían encabezar los institutos que pusieron como condición para apoyar a Marco Morala en la investidura, consiguieran que este, por decreto, les diera las concejalías de Cultura, para ella y Formación y Empleo para él.
A las pocas horas y tras negociar también las enmiendas que iban a presentar a los presupuestos -de 50, la Secretaría recogió 39 y de ellas se pactaron 12 para llevar a aprobación-, el alcalde revocó ese decreto."Morala me llama para decir que está todo roto porque CB no acepta", recuerda González. En ese momento se suspende el pleno extraordinario de aprobación de presupuestos y "la secretaria nos dice que el alcalde ha revocado el decreto y que puede hacerlo sin causa".
"Hemos sido los concejales con menos horas en la historia de Ponferrada", dice con sorna. Al conocer que se les quitaban esas competencias, decidieron renunciar a su sueldo, no con efecto retroactivo, porque asumen que estos meses han trabajado desde dentro, sino a partir de esa revocación "es lo más lógico y sensato desde el momento en el que no nos dejan realizar nuestro trabajo. Si no hay trabajo no se cobra".
Sobre sus enmiendas a los presupuestos, asegura que los recibieron dos días antes de la comisión de Hacienda, sin tener contacto con el PP. Ese escaso tiempo para revisarlos hizo que se abstuvieran en la comisión.
"Nosotros hemos sido leales con el pacto y ellos deberían ser leales a las personas que les apoyan porque si no, dudo que lo puedan ser a nuestros vecinos", dijo.
"No estamos pidiendo nada que no esté en el pacto de gobierno. No les queda más remedio que delegarnos esas concejalías", apuntó González. "Representamos a 2.300 personas que no son ciudadanos de segunda, tenemos los mismos concejales que CB. Nosotros no negociamos cogobierno en su momento, pero lo que negocia PP con Vox debe ser respetado", apuntó la portavoz.
El PP no se ha puesto en contacto con su grupo desde la revocación del decreto y "creo que está tirando balones fuera", valoró, aunque sabe que la suma les obligará a negociar, porque el pleno de presupuestos sigue latente y el voto de Vox sería necesario para sacarlos adelante.