El Zofreral de Cobrana cruza los dedos para que 2025 le traiga la lotería de auparse como Bosque del Año, cogiendo el relevo a otro enclave berciano que ha ostentado ese galardón a lo largo de 2024, el soto de castaños de Villar de los Barrios.
El día 15 se cierran las votaciones pero el último recuento lo pone en cabeza con más de 6.000 votos.
El galardón requiere de un respaldo social al bosque, de sus cuidados y tiene que ser una zona con una riqueza singular. Y cumple con todos los parámetros con mucho. Incluso es un alcornocal que ha inspirado a la compañía de teatro local Dinamia, que ha hecho en él la “senda encantada”, un recorrido en el que, entre los árboles aparecen hadas y trasnos con mucho que contar.
Al zofreral, como se conoce a un conjunto de alcornoques, que, en este caso, comparten amistad con castaños centenarios y que cuentan con una riqueza paisajística excepcional, lleva 15 años recibiendo el mimo del pueblo y compartiendo con él dos rutas que se han creado para poder disfrutarlo, una más corta que la otra.
Una de ellas cuenta con 10 kilómetros y la otra con algo más de 3 y ambas son circulares.
El camino más corto recorre Cobrana, el bosque de castaños La Cabaña, el Zofreral El Escobal y el Zofreral de las Lleras.
El trayecto largo pasa por los mismos lugares que la ruta corta, pero incluye el Zofreral de los Tesos, del Moucho y de Arriba, el Mirador de Peña Redonda y el Molino Campo Villarín. Incluso se puede marchar una tercera opción que une a todo lo que contiene la ruta larga, la zona del Alto de los Navallos, ya a 1.120 metros de altura.
Los tres merecen la pena y cuentan para poner en valor un enclave que, en el último recuento de votaciones ya encabezaba la lista de candidatos. Este año se presentan cuatro enclaves. Otro es leonés, el Faedo de Orzonaga, en Matallana de Torío, aunque este estaba mucho más lejos en las votaciones –el berciano rondaba las 6.000 y el faedo se quedaba casi en las 2.000-. Se suman a la ruleta el bosque de El Guindel en Salvatierra de los Barros, Badajoz y el Castañar de Apellániz en Álava.
De conseguir el galardón Cobrana será un hito, puesto que se repite comarca dos años seguidos. Pero eso querrá decir que la riqueza natural del Bierzo es incomparable.
Ser Bosque del Año abre las puertas a dar visibilidad a estas zonas y también a realizar actividades en ellas, además de que las administraciones pongan los ojos en sus cuidados.
El soto de Villar no ha tenido una gran respuesta en este terreno, puesto que una parte de él ha estado en malas condiciones para el paseo por el barro que contenía y no se consiguió que el Ayuntamiento de Ponferrada lo acondicionara para aprovechar ese galardón. Villar ha querido acabar el año con un calendario que hace protagonista a su soto y así inmortalizar este galardón.
Ahora Cobrana coge aire y cruza los dedos para escuchar su nombre el 20 de diciembre tras el recuento de votos virtuales.
El concurso del Árbol y Bosque del Año en España se creó en el año 2007, por la ONG Bosques sin fronteras. Se convirtió en el primero de Europa y en el mundo con esta iniciativa. En 2011 se creó el premio a nivel europeo Tree of the Year organizado la Fundación Alianza (Nadace Partnerství) que engloba todas las iniciativas nacionales que se han ido creando en los diferentes países.
El objetivo del concurso es destacar los interesantes árboles y bosques singulares del territorio español como un importante patrimonio natural y cultural “que deberíamos apreciar y proteger”.
Se valora la historia y la relación con las personas y el territorio de estos enclaves. Este año el galardón lo tiene el soto de castaños de Villar de los Barrios. El día 20 se sabrá quién ha ganado la batalla pero hasta el 15 de diciembre se puede votar.
El bosque de Cobrana, en su conjunto forma un maravilloso conjunto de árboles monumentales de más de 280 hectáreas, que empieza en el pueblo y que va subiendo por el monte hasta el mirador al Bierzo Alto.
Una asociación vecinal lo mima a él y a los seres mitológicos que habitan esta ruta algunos meses del año.
Son más de 6.000 visitantes los que han pasado por la Senda Encantada que acoge este enclave que espera encumbrarse con el galardón de Bosque del Año.
Además, otro de los valores que pone sobre la mesa la Asociación del Zofreral de Cobrana es que la Ruta de los Alcornocales pretende promover el respeto a la naturaleza y los valores que la propia naturaleza ofrece, “atendiendo y cuidando un bosque único al ser el alcornocal más septentrional de la península Ibérica”.
“Nuestro proyecto es seguir cuidando de este bosque y de su entorno para las generaciones futuras y asegurar futuras sacas de corcho”, explican, apuntando que desde hace varios años su trabajo se ha visto respaldado también por patrocinadores que han colaborado con estos fines.