El 'impulso' necesario para el Bierzo

‘Reindustrialización’ es el término de moda en Ponferrada. Con tres elecciones –nacionales, autonómicas y municipales– en apenas un mes y una campaña electoral especialmente intensa en el Bierzo, donde la incertidumbre económica que vive  la comarca tras el fin de la minería y el cierre de las centrales térmicas ha marcado los discursos, formaciones de todos los colores, instituciones y empresarios han puesto de manifiesto una y otra vez la necesidad de que el Bierzo vuelva a ser atractivo a nivel industrial.

Y con ese propósito, Fundación Centro Internacional de Materiales Avanzados y Materias Primas (Icamcyl) contará con la compañía Impulso en el asesoramiento y asistencia profesional para identificar, captar y gestionar incentivos que atraigan proyectos empresariales al Bierzo y propiciar la llegada de inversiones industriales con proyectos generadores de empleo.

Y es que el Bierzo lleva años esperando un impulso –valga la redundancia–, que no termina de producirse, una preocupación que ha se ha instalado en toda la sociedad berciana, surgiendo numerosos movimientos ciudadanos que han tratado de llamar la atención de grandes empresas como Tesla, cuyo inexistente desembarco en Europa, alentado por informaciones contradictorias, provocó multitud de propuestas.

El presidente de Icamcyl, Alberto Fernández Sutil, y el director general de Impulso Industrial Alternativo, Francisco Cuervo, firmaron ayer en Ponferrada un acuerdo de colaboración entre ambas entidades que quiere poner fin a este tipo de pasos en falso y acelerar la recuperación económica de la comarca. «Buscamos la reindustrialización del Bierzo y por eso firmamos este acuerdo de colaboración con Impulso, para atraer proyectos que tengan su acomodo en el Bierzo y que hagan que los proyectos industriales crezcan en nuestra zona», señaló Fernández Sutil.

Por su parte, Cuervo incidió en que su objetivo es «promocionar la zona del Bierzo por las magníficas condiciones que tiene de ubicación y de ayudas públicas y aportar nuestro granito de arena en la experiencia con proyectos en Asturias, en León y en Castilla y León, donde hemos colaborado últimamente en la solución del problema de Vestas».