El PP y el PSOE buscan pareja de baile en Ponferrada

Hará falta un baile agarrado, incluso con múltiples parejas, para gobernar Ponferrada. La dispersión del voto se confirmó este domingo en unas elecciones que ya se perfilaban como las más disputadas en los últimos años. Con diez partidos en liza, siete de ellos logran entrar en la corporación y ganan votos a los partidos tradicionalmente mayoritarios: PP y PSOE.

La sangría es especialmente grave en el caso de los populares, a los que un gran número de votantes -exactamente 5.949- les han dado la espalda, lo que supone la pérdida de nada menos que cinco concejales respecto a los 12 de los anteriores comicios, cuando sumaron 13.482 votos.

Un batacazo que deja a su candidata, Gloria Fernández Merayo, con sólo siete concejales, a uno de diferencia del PSOE liderado por Ángela Marqués, que también pierde 1.677 votantes y con ellos dos ediles respecto de los ocho logrados en 2011.

Ambas tendrán que ensayar pasos de acercamiento si quieren gobernar. La formación más solicitada para un tango, o un pasodoble en su defecto, sería la nueva formación de USE Bierzo, liderada por el ya alcalde en funciones, Samuel Folgueral, que consigue estrenarse con cinco concejales y, dentro de una línea política de centro izquierda, según los promotores del partido, ocupa de alguna forma el hueco dejado por la desaparición de IAP, el extinto partido de Ismael Álvarez, con el que consiguieron la llave del municipio.

Ahora el llavero ha cambiado de manos, pero la calculadora funcionará mucho estos días, ya que los nuevos partidos políticos que han conseguido un hueco en la corporación también pueden tener mucho que decir. Ciudadanos, Coalición por el Bierzo y Ponferrada en Común consiguen dos sillones para los dos primeros de sus listas y abren la posibilidad de una terna municipal que procure una legislatura en la que se puedan tomar decisiones que se lleven a término.

A pesar de todo, al margen de los acuerdos que finalmente logren la formación de un equipo de gobierno, la previsión clara es que los Plenos municipales obligarán toda una intensa negociación previa en el panorama de una corporación municipal que es la más plural y compleja que se ha producido en la capital del Bierzo. En ella, con una entrada tal vez inesperada, por la barrera ante la que se había encontrado en pasadas elecciones, está también el histórico Tarsicio Carballo, que logra un acta de concejal con su formación bercianista del PRB, y completa de esta manera un panorama municipal en el que no hay un ganador claro y los partidos con más votos: PP y PSOE, necesitarán afinar sus argumentos y conseguir amigos para llegar a la Alcaldía.