Sobre la negociación con UPL, Morán aseguró que «en principio vemos buena sintonía, nosotros hemos puesto sobra la mesa la idea de provincia que tenemos y parece que ha sido bien aceptada, pero, como ocurre en cualquier negociación, la otra parte hará planteamientos que estamos esperando para ver si podemos aceptarlos y en función de eso plasmarlos en un acuerdo definitivo».
Matías Llorente también se refirió ayer a esas negociaciones para la conformación del equipo de Gobierno de la Diputación, donde UPL tiene la llave. El veterano diputado ha presentado su candidatura para ser el represente del partido leonesista en la institución provincial, con Miguel Ángel Lozano, alcalde de Matadeón de los Oteros, como suplente. Según explicó Llorente, hasta el momento ningún otro concejal del Partido Judicial de León ha presentado su candidatura y el plazo se cierra hoy a las 21:00 horas.
Preguntado por los posibles pactos para la gobernabilidad de la institución, Llorente mantuvo la misma cautela que ha mantenido desde las elecciones del pasado 26 de mayo. «Las negociaciones las lleva la UPL. Yo estoy dentro de UPL como la Unión de Agricultores y Ganaderos de León (Ugal) y acataré aquella negociación y acuerdo al que llegue la dirección y que luego lo apruebe el consejo. Una vez que tengan esos acuerdos, insisto, acataré si tengo que gobernar con unos o con otros».
En la misma línea reiteró «ahora mismo, en mí última etapa de la vida no voy a coger y saltarme a la torera los acuerdos de un partido, ya tengo una experiencia y no quiero tener más experiencias de este tipo».
Respecto a los dos partidos con los que puede negociar UPL, Llorente recordó que nunca ha tenido carné de ningún partido, que siempre han sido acuerdos a través de Ugal. Sobre su inclinación a las políticas de izquierdas, Llorente atajó «desde el 76 que empecé con la Revolución de los Tractores siempre he sido una persona más de izquierdas que de derechas, pero a veces tienes que tragarte cosas, aunque no quieras».
Gestión y despedidas
El pleno de la Diputación aprobó ayer la quinta fase del Plan Provincial de Cooperación Municipal en un pequeño paso administrativo más dentro de la situación que vive la institución provincial pendiente de la conformación del nuevo equipo de Gobierno. La sesión estuvo marcada por las despedidas de dos diputados que no volverán al plenario en el próximo mandato. Joaquín Llamas renunció a su acta tras 16 años como miembro de la corporación provincial, siempre en la oposición. El exalcalde de Villarejo de Órbigo deja su acta para reincorporarse a su puesto de trabajo en Cosamai, incompatible con la condición de diputado. También se despidió el que fuera elegido diputado por Cs y expulsado del partido a consecuencia de la Enredadera, Juan Carlos Fernández.