Silván considera que San Marcos es "irrenunciable" para el turismo y la economía de la ciudad. "Desde 2004 se buscaba reformar el Parador. Han pasado muchos gobiernos de diferentes colores políticos, pero en 2016 la presidenta de Paradores buscó financiación y se comprometió a hacer unas obras absolutamente imprescindibles. Si no se hubieran acometido las obras, hoy estaría cerrado y sin ninguna expectativa", ha explicado el candidato del PP.
Al acto también acudieron representantes de diferentes asociaciones leonesas de hostelería y empresarios, los cuales quisieron mostrar su respaldo a la reforma íntegra del Parador. Unas obras sobre las que "no tienen noción" de cuánto se van a prolongar en el tiempo. "A lo mejor pasan años, como en otros Ayuntamientos como el de Ibiza, Veruela o tantos otros, en los que llevan 20 años cerrados porque no se pinta una partida presupuestaria", ha indicado Alarcó.
Cronología de un bloqueo
En su visita a León, la expresidenta de Paradores ha querido hacer un barrido sobre los acontecimiento que han llevado a la situación actual de San Marcos. De esta manera, Alarcó ha asegurado que una de sus primera medidas en el cargo fue "decir que no al Parador de León que costaba 70 millones de euros en el primer proyecto de 2014. "El Gobierno anterior no puso ese dinero y Mariano Rajoy no pudo comprometerlo con una prima de riesgo disparada como en aquel momento. En cuanto hubo una oportunidad pensamos que había que hacer algo en León y solicitamos una licencia para reparar el Parador histórico", ha relatado.
Alarcó ha manifestado que en aquel momento estaban "mal informados" y que el Ayuntamiento "echó para abajo la licencia" al solicitarse solo para la parte antigua y realizar una inspección técnica "muy preocupante" sobre el estado de San Marcos. "Si el Parador se hubiera cerrado en aquel momento, hoy no tendríamos licencia de obra y no se hubieran iniciado", ha valorado la que fuera presidenta de Paradores.
Ante esa situación se comenzó a trabajar en una licencia tanto para la parte histórica como la moderna del enclave, en una gestión en la que, según asegura la expresidenta de Paradores, el papel de Silván fue destacado "acelerando y hablando con todos los lados". Con la primera fase en la mano, se buscó "pintar una partida" en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para continuar con el proyecto de reforma. "La primera parte la pagó íntegramente el 'cash flow' de Paradores, generado con sus recursos propios. No se pidió financiación y no se endeudó la empresa. Sin embargo, el edificio moderno no está dentro del pliego de concesión que tiene Paradores porque no es un mantenimiento como el histórico. Es un gasto nuevo y lo tienen que acometer los PGE", ha explicado Alarcó.
La moción de censura a Rajoy cambió el escenario según Silván y Alarcó, evitando que se "solaparan las dos fases como estaba previsto". "Un 60 por ciento de lo que se invierte en un edificio histórico repercute en la ciudad", ha reivindicado la expresidenta de Paradores expresando su deseo de que se pueda encontrar una solución al bloqueo.