El motivo de esta renuncia es "no servir de excusa a parte de la oposición para llevar a cabo la moción de censura que tendrá lugar el próximo viernes", según se ha explicado desde el Ayuntamiento. “Nadie puede tener duda de mi honradez, y de hecho en la actualidad no existe ningún cargo contra mí y ni siquiera estoy citada a declarar por las investigaciones de la Operación Enredadera, pero en conciencia no puedo permitir que nadie utilice una conversación personal para terminar con un proyecto político bueno para el municipio", ha destacado Varón.
La concejala también ha querido recalcar su compromiso con el Ayuntamiento, “Doy este paso por el bien de Villaquilambre. Porque si el viernes sale adelante la propuesta de parte de la oposición tengo la convicción de que esta se traducirá en una parálisis de la actividad municipal durante los pocos meses que quedan de legislatura. Nadie puede tener una excusa para seguir adelante con una Moción de Censura que únicamente responde a las ansias de poder del Partido Socialista, que como ya ha hecho en otras instituciones, pretende conseguir de forma torticera lo que no ha obtenido en las urnas, y por supuesto a los intereses personales de algunos concejales”, ha apuntado.
Apoyo de las concejales no adscritas
La dimisión de Mónica Varón llega después de que las dos concejalas no adscritas, Carmen Pastor y Ana Isabel Sánchez, expulsadas de Ciudadanos al comienzo del mandato, mostraran públicamente su negativa a apoyar la moción de censura presentada por PSOE, Ahora Villaquilambre, UPL, UPyD e IU. Según han explicado en un comunicado de prensa, han llegado a "un acuerdo" con el alcalde, Manuel García, para evitar esta moción. En primer lugar, que la edil popular dimita, algo que se ha concretado este martes. En segundo lugar, que el regidor dé explicaciones de cómo es su situación judicial actualmente.