Las escuchas a Sadat Maraña revelan que tuvo contactos con otros empresarios

Desgranando el contenido de los más de 8.000 folios del sumario de la Operación Enredadera van apareciendo infinidad de conversaciones de los diferentes investigados, algunas relacionadas con la trama y otras que nada tienen que ver. En el caso del ex coordinador de Ciudadanos en la Diputación Provincial, Sadat Maraña, las escuchas de la policía reflejan sus conversaciones con otros empresarios de la provincia de León, además de con el detenido José Luis Ulibarri, sobre asuntos completamente ajenos a la investigación que lleva a cabo el juzgado de Badalona, que el pasado 5 de julio envió al conocido empresario a prisión provisional y sin fianza al considerarle presunto cabecilla de la trama.

Una de esas escuchas realizadas por la policía está protagonizada por Sadat Maraña y diferentes directivos del Grupo Carflor, en la que se hace referencia al pago de una cantidad de dinero al ahora investigado. Fuentes de la empresa han asegurado que "como otras muchas personas, Sadat Maraña pedía trabajo de manera reiterada a Carflor, ante la delicada situación económica personal que atravesaba y su búsqueda de trabajo por su posible salida de la política. Ofrecía su colaboración para determinados servicios en los que él consideraba que podía ser útil, como la búsqueda de publicidad a clientes para un nuevo servicio de pantallas comerciales adquiridas por Carflor, tarea en la que llegó a colaborar puntualmente con nosotros". Desde el Grupo Carflor, dedicado entre otros sectores a los servicios sociosanitarios y editor de La Nueva Crónica, han asegurado que "nunca hemos obtenido ningún tipo de contrato a través de Sadat Maraña, jamás, sino que simplemente nos facilitó contactos de posibles clientes para la nueva actividad de comunicación que estamos desarrollando en las pantallas comerciales". Por lo que se refiere a la entrega de dinero a la que se hace referencia en las conversaciones incluidas en el sumario de la Enredadera, desde Carflor aseguran que "Maraña solicitó de manera personal una ayuda económica que se le prestó para hacer frente a la operación de una de sus hijas, que padece una grave enfermedad. El consejero delegado del periódico le prestó dinero y lo volvería a hacer en esas circunstancias, sin conocer en absoluto la relación que Maraña podría tener con los implicados en la trama Enredadera y con su presunto cabecilla, José Luis Ulibarri, del que el Grupo Carflor es una de más las muchas víctimas al verse afectado en infinidad de ocasiones por la forma de operar del empresario ahora encarcelado y también imputado en la trama Gurtel".