En el municipio de Puebla de Lillo, en Cofiñal, nace el río Porma, uno de los más importantes de la provincia de León. Entre pinos centenarios arranca con fortaleza en el puerto de las Señales y en unos pocos kilómetros se embalsa en uno de los grandes pantanos de la provincia. Durante su recorrido a través de la montaña, son varios los afluentes que se suman a él, como el arroyo de Cofiñal, Celorno, Barbadillo, Pinzón, Tronisco y Arianes entre otros, sin olvidarse de otros cuyas aguas vierten directamente al embalse, provenientes de las localidades de Redipollos, Solle Orones, Valdehuesa y Rucayo. Otros de sus afluentes son los ríos Isoba y Reyero.
Aquí, la trucha es la reina de la cabecera alta del Porma y de todos los riachuelos que bajan desde los puertos de montaña, siendo la zona de pesca más afamada e importante el coto de Vegamián, que con algo más de 16 kilómetros va del puente de Redipollos hasta el estrecho de la Peña de Armada y Peña Utrero. Es uno de los tramos acotados de León favoritos de los pescadores, ya que está situado en un paraje espléndido en plena montaña leonesa, siendo sus majestuosos paisajes otra razón para pescar aquí.
Si bien todas sus aguas ofrecen la posibilidad de pescar grandes ejemplares de trucha común, los aficionados se decantan por la parte más alta, en las tablas próximas a la ermita de Las Nieves y también por debajo de Camposolillo, como las mejoras zonas de pesca.
Sin muerte
En la presente temporada de pesca que está a punto de comenzar, en este coto solo se contempla la pesca sin muerte de trucha, con diez permisos diarios. Como cebo solo están permitidas la mosca artificial, cucharilla u otros señuelos siendo, en todos los casos, con un único anzuelo desprovisto de arponcillo o muerte.
Rincones únicos
Puebla de Lillo se erige como un destino de naturaleza. En este municipio podemos disfrutar de bosques mágicos como hayedos, robledales o de avellanos, lagos glaciares, riberas de ríos o pueblos con encanto propio, sin olvidarnos de ferias y eventos que se basan en la tradición y forma de vida propias de la montaña.
La naturaleza es un buen reclamo, y este municipio dispone de varias rutas de senderismo, con dificultad baja o media, que transcurren por caminos, veredas y senderos, concretamente las rutas la Cervatina, Entrevados, Picos de Mampodre, Las Biescas, lago de Isoba, lago Ausente, y la ruta del embalse del Porma, o los más 120 kilómetros de rutas para BTT. Al atractivo de estas sendas, se suma la cercanía del municipio con la estación de esquí San Isidro, a escasos 15 kilómetros.