Los personajes del tío Ful: Raúl, joven y árbol en Santibáñez de la Isla

En la semana del Día del Árbol y los Bosques es casi obligado mirar para una de las iniciativas más singulares en este campo, en Santibáñez de la Isla, donde su bosque es un parque que crece con un nuevo árbol cada vez que nace un niño en el pueblo, o fuera de él pero descendiente de la localidad.
- ¿Cómo te llamas?
- Raúl.
- ¿Y el árbol que tienes detrás?
- Raúl también.
- ¿Y tú qué eres?
- Estudiante.
- ¿Y el árbol?
- Una secuoya sempervirens. Somos quintos, los dos del año 2003; y los de al lado también de 2003, uno es el de mi amiga Vega, un gimgko biloba.

No es un misterio, ni un acertijo, es una curiosa y admirable iniciativa de la Junta Vecinal y la Asociación Cultural y Deportiva Río Tuerto por la cual, desde el año 2003, cuando nace un niño sus padres adquieren un árbol que va a "ser del recién nacido para siempre" y se incorpora al parque. Todos los nacidos en el año se reúnen en las fechas apropiadas para ello, en febrero, y los plantan. En breve se colocará una placa con una breve inscripción, del nombre del chaval y el árbol, la especie, el año que se plantó...

- ¿Es especial un árbol que lleva tu nombre y plantado para ti?
- Por supuesto. Le coges mucho cariño al parque, lo cuidas, vas a ver tu árbol, el de tus amigos...
- ¿Cuántos se han plantado ya?
- Por lo que nos han dicho Enrique y Onésimo, que son los que llevan el tema, ya hay 146 de más de 80 especies diferentes de todo el mundo. Pero en todo el parque ya hay alrededor de 500 árboles pues ya existía antes de esta idea que arranca en 2003.

El parque San Juan nació realmente en 1957, con 30 plátanos y 30 acacias, y tuvo una ampliación en los 90 con más de 200 nuevos árboles.