El paso del tiempo nos va regalando instantes, y nuestra mente se encarga, con los años, de embellecerlos detalladamente, haciendo que revivamos con nostalgia cada segundo, arrastrándonos incluso a la melancolía.
El poeta romántico William Wordsworth escribió en 1807 “Oda a la Inmor talidad. En unos sencillos versos llenos de delicadeza y profundidad, nos habla del deseo de volver a vivir la experiencia de un pasado esplendoroso pero inalcanzable, de lo efímero de la vida y de la juventud que ya no volverá.
En 1961, el escritor y director de cine Elia Kazan se inspiraría en este poema de esperanza para dirigir “Esplendor en la hierba”, convirtiéndola en una obra maestra. Kazan critica la puritana y rígida moral americana, a la vez que, valiéndose del poema de Wordsworth, ensalza el valor de los recuerdos aunque nuestros sueños no se cumplan.
La espléndida banda sonora a cargo de David Amram y la poderosa fotografía de Boris Kaufman de intensos colores, ayudan a potenciar la atmósfera evocadora y nostálgica de la película.
«Aunque ya nada pueda devolvernos la hora del esplendor en la hierba, de la gloria en las flores, no debemos afligirnos, porque la belleza subsiste en el recuerdo».