Tras seis años de lucha contra la enfermedad, el escritor cacabelense que fue columnista en el periodo inicial de La Nueva Crónica, Fermín López Costero se iba aferrándose a quedarse para seguir con sus publicaciones que concluía con un trabajo sobre las revueltas irmandiñas. López Costero se ha ido con 56 años y un ingente curriculum literario a sus espaldas. Discípulo confeso de Pereira, López Costero incluso le dedicó un trabajo completo al que fuera su estela. De él es el poemario Memorial de las piedras, 2009, que recibió el Premio Joaquín Benito de Lucas.
Más cercano nos queda La fatalidad, de 2014 en el que aparecen esas alusiones a su enfermedad encontrada. La costumbre de ser lluvia, de2016 nos deja su buen hacer en poesía, pero también en cuentos con su Pequeño catálogo de historias breves, de 2003 o losmicrorrelatosde La soledad del farero y otras historias fulgurantes, de 2009. Entre sus últimos trabajos está el Teatro de Sombras, que lo encumbra como literato referente en el género breve.
Generoso, tranquilo y sobre todo curioso, López Costero se va temprano, pero tras de sí deja una huella imborrable en forma de libro que quiso exprimir al máximo.
Fallece el escritor Fermín López Costero a los 56 años
El cacabelense discípulo de Pereira murió tras una larga enfermedad dejando un ingente curriculum literario
15/02/2018
Actualizado a
18/09/2019
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