Cuando Rivero decía estas palabras ya reconocía que había dos nuevos pasos en el camino hacía esta «independencia» de la lucha leonesa: la reunión esta semana de la ‘Comisión para el tránsito hacia la Federación propia’ y unos días más tarde la asamblea de la Federación de Deportes Autóctonos de Castilla y León (en la que legalmente está integrada la lucha leonesa) para la Disgregación de la Lucha Leonesa de las modalidades que ‘alberga’.
Y en los dos sentidos se handado pasos. La Federación informa de que «la Comisión creada por la Federación Territorial de Castilla y León de Lucha para supervisar todos los pasos encaminados hacia la constitución de la Federación propia de Lucha Leonesa, ha celebrado una reunión en la tarde de este miércoles, día 29, en la que se analizó la situación en la que se encuentran las gestiones realizadas en las últimas fechas y también los pasos a seguir en las próximas semanas. Al encuentro acudieron el presidente de la Territorial, Ángel Rivero, el asesor jurídico de la Federación, Jesús Sánchez, el tesorero de la misma, Francisco Reguera, el directivo Miguel González y el asesor presidencial, Héctor de Castro».
Un dato importante de esa reunión es la información de que la directora general de Deportes, María Perrino Peña, «ha mostrado su total respaldo a las pretensiones de alcanzar ese estatus de Federación propia de Lucha Leonesa a la mayor brevedad posible. Tanto es así, que la propia directora General ha instado a los representantes de la Federación de Deportes Autóctonos de Castilla y León (en la cual está ahora mismo englobada la Lucha Leonesa) para que aborden en su Asamblea General prevista para el próximo día 23 de agosto, la disgregación de la modalidad de Lucha Leonesa de esa Federación», paso legal inevitable para facilitar el tránsito hacia la Federación propia.
Y la prueba de que se va a abordar este asunto es que el Bocyl ya ha publicado este martes, día 28 de julio, la citada convocatoria de una Asamblea General Extraordinaria con un punto en el orden del día que dice textualmente: «Disgregación de la modalidad: Lucha Leonesa y Modificación Reglamento Electoral».
El largo y silencioso trabajo de Héctor de Castro y un equipo
El objetivo de lograr una Federación propia de lucha leonesa siempre estuvo en la boca del presidente Ángel Rivero, del que no hay que recordar que ya hace décadas dirigió este deporte pero no como federación sino con Agrupación Provincial de Lucha Leonesa, que suena muy parecido a lo que ahora parece que está a punto de lograr y, de paso, cerrar ese galimatías legal tan difícil de entender desde fuera de la lucha.
Rivero contó para esta causa con un equipo de cercanos —su inseparable Miguel, ‘Chuli’ y ahora Paco Reguera, pero también se le unió alguien que ya estuvo en aquella aventura, entonces como luchador: Héctor de Castro Villa, quien, como es costumbre de la casa, trabajó mucho y en silencio, en la sombra, pero tocando los hilos precisos, por ejemplo a su amigo y paisano el procurador Luis Mariano Santos, que fue quien llevó las propuestas a la Junta de Castilla y León, también hay que reconocérselo de una forma bastante discreta. Y ahora Héctor se va de nuevo a sombras, mira la foto de familia de esta misma página, del inicio de los trabajos, ¿quién falta? Héctor de Castro.
Pues sí estuvo allí. Pero es así.