Águila Roja sigue 'protegiendo' a Sorribos de Alba y van 40 años

Las Juntas Vecinales son una singularidad de esta tierra que hace que muchas veces pasen desapercibidos en la maraña municipal de las elecciones numerosos personajes que también tienen su historia, su anecdotario... hay más de dos mil pueblos en la provincia, lo que da idea de los presidentes (alcaldes pedáneos) que también estos días estrenan cargo.

O repiten. O tripiten... o vaya a usted a saber cómo se dice cuando alguien lleva 40 años en ‘la poltrona’ (si la hubiera) de su pueblo. Es el caso de Francisco Javier Suárez Sierra, Javi el presidente de Sorribos de Alba, y para sus vecinos ‘Águila Roja’, por la fascinación que Javi siente por el protagonista de esta serie y por sus curiosas aficiones, que provocan las miradas y las preguntas de quienes atraviesan la carretera del pueblo y ven una gran huerta llena de singulares construcciones: un tipi indio; merenderos, para quien atraviese la zona; postes convertidos en esculturas; grafitis en los que le ha ayudado el gordonés Sergio Canga... «Todo está pensado para la gente; el tipi me lo pidió mi hijo pero ahí está y lo demás pues mucha gente viene a verlo, otros descansan ahí... en fin, y yo me entretengo, sobre todo desde que me jubilé de la Térmica de La Robla».

- Con esta vocación de servicio no me extraña que lleves media vida de presidente del pueblo...

- ¿Media vida? Mucho más. Llevo cuarenta años de presidente y acabo de renovar por otros cuatro años. Yo lo quería dejar pero la gente no quiere y ahí sigo, no se si habrá muchos más en la provincia que lleven tanto tiempo.

- ¿Desde cuándo?

- Yo creo que desde el año 82, o sería el 83. Era cuando Adolfo Suárez y Felipe González y todos aquello, que mira que ya ha llovido.

- Pero si no te dejan marchar será que algo hiciste bien...

- Se intenta. Claro que hice cosas, como el polideportivo, por decir una.

- ¿Y lo de Águila Roja?

- Porque me gusta defender a los míos, como hace él, a los de Sorribos. Y andar por las alturas.