Amigos del mocho, enemigos de los guarros

Un recordado periodista deportivo, unfuncionario y ex jugador de la Cultural, un defensor de la Carta de la Tierra, niños, jubilados, activos, hombres, mujeres, muchas veces el perro de alguno de ellos... integran un singular colectivo: Los amigos del mocho, que llevan tres años saliendo cada primer domingo de mes a cumplir con su lema: «De puente a puente,limpio con la gente decente».

Hemos encontrado de todo, desde un colchón a una caja de música, un carrito de bebé, conos, bolsos Este domingo volvieron a salir a patrullar contra la suciedad. Catorce fueron los que desafiaron el frío y las malas previsiones para, provistos de guantes y mucha voluntad, volver a recoger los residuos que se han acumulado desde octubre. El dato singular de la quedada de ayer —cada mes tiene su aquel— fue «la impresionante cantidad, hablamos de cientos de toallitas, que encontramos pegadas a las piedras, fruto de una crecida que ya fue hace unos meses, pero que todavía persisten, lo que nos da la idea de que se trata de un grave problema de contaminación».

E insisten en algo que se repite en todas las salidas de los primeros domingos de mes: «Desde el puente de San Marcos los transeúntes tiran una gran cantidad de envoltorios de caramelos y otros dulces, parece como si fuera una costumbre».

En los más de treinta meses que llevan saliendo es largo el ‘triste’ anecdotario de lo que se han ido encontrando: «De todo, desde un colchón a una caja de música, bolsos y bolsos, carritos de bebé, conos de señalización de tráfico.... pero, al margen de las anécdotas, lo que más le preocupa “porque es lo más perjudicial para el Bernesga en este caso y para cualquier río es todo aquello que se degrada con mayor dificultad, como pueden ser los envases de vidrio o las latas de todo tipo, bebidas, conservas...».

Una singular patrulla urbana a la que te puedes sumar, los amigos del mocho, en diciembre vuelven a la carga.