"La fiesta es el lunes pero hay que trabajar, mejor hoy. Ya empezamos por la mañana con una misa en la Colegiata de Arbas y lo cerraremos con una cena... y lo que pida el cuerpo", explican los camioneros que allí acudieron, de toda la comarca: Villamanín, La Robla, Canales, Cistierna o Santa Lucía, con el panadero Julio con un curioso modelo matrícula de Orense.
Entre los asistentes se suceden las bromas, las anécdotas, las historias... con las más populares de la reunión, "Leti y Ani, camioneras", repiten. Y así es, son las jóvenes Leticia Rodríguez (23 años) y Ani González Viñuela (33), que son amigas desde hace tiempo y decidieron sacarse el carnet de conducir juntas. "Le dije que me estaba sacando el carnet y se apuntó"; y así llevan alrededor de dos años ‘a los mandos’ de dos grandes trailer por las carreteras.
- ¿Qué transportáis?
- Yo ahora, en la época de la trashumancia, me dedicó sobre todo al ganado, para subirlo de Extremadura fundamentalmente, porque ya casi nadie hace el recorrido a pie; explica la más joven, Leti.
- ¿Existía tradición de camioneros en la familia?
- No, en mi caso no, fui yo la que me lancé a la aventura, me gustaba y para allá que fui.
Cuando dice Leti que "en mi caso no" ya apunta a que en el caso de Ani sí la hay y ella lo corrobora. "Sí, yo lo vi siempre en casa, mi padre siempre fue camionero y al final yo también acabé en el oficio".
- ¿También transportas ganado?- No, en mi caso no. Yo me dedico a la paquetería y a veces llevo gasoil; explica Ani, que es prima de otra joven también dedicada al transporte, en su caso al taxi, y que apareció en una entrevista hace unos días, Sonia, de Cofiñal, con su Cofitaxi.No es la de camionero una profesión que se asocie mucho a las mujeres, aunque cada vez son más las que se suben al volante de grandes camiones. "Cada vez somos más, es cierto, nos encontramos con compañeras en diferentes lugares pero tampoco es que todo el mundo lo tenga asumido, aún nos pasan cosas...", explica Leti.- No lo dejes ahí, ¿qué cosas os siguen pasando?Y las dos guardan recuerdos de algo más que anécdotas, de comportamientos reticentes al ver que son estas jóvenes de Villamanín las que les van a realizar algún trabajo. "Si quieres te fías y si no también, no te queda otro remedio". Y Leti, que recuerda algún caso así "a pesar de que iba con mi padre", lo tiene muy claro: "Ya se lo explicamos: No pasa nada, con las mismas que vine marcho y tú verás cómo te arreglas", aunque finalmente no dejaron de realizar ningún trabajo y también son muchos los casos en los que las reciben con confianza y una amabilidad exquisita. - ¿Y parta seguir en el camión?- No lo dudes, nos gusta.Pues nada, que San Cristóbal os proteja. (Y suena otra vez el claxon).