Beatriz García Prieto: "La mujer sufrió represión doble: por roja y por mujer"

La represión franquista sobre las mujeres protagonizó la jornada del miércoles en el curso de verano de Cistierna

Fulgencio Fernández
19/07/2017
 Actualizado a 18/09/2019
Beatriz García durante su ponencia. | ANA CRISTINA
Beatriz García durante su ponencia. | ANA CRISTINA
La represión franquista sobre las mujeres fue uno de los temas abordados en la jornada de ayer en el Curso de Verano de Cistierna dedicado a la Historia y memoria de las víctimas de la dictadura franquista. La ponencia fue presentada por la historiadora Beatriz García Prieto.

La ponente recordó que «El triunfo del bando franquista en la Guerra Civil supuso un duro golpe para el género femenino, debido a que el nuevo régimen impuso el modelo de mujer nacional-católico que relegaba a las mujeres a un lugar secundario y doméstico, sometidas al varón de la casa y destinadas a las funciones de esposa y madre. Todo lo anterior tuvo como consecuencia una completa involución en derechos y libertades para el género femenino».

Y si la mujer fue relegada, las que además pertenecían al bando republicano, las derrotadas, sufrieron una dura represión. «Y no solo las que podríamos llamar militantes, las concienciadas y comprometidas con la causa, también las que hemos llamdo  mujeres de rojo, es decir, aquellas que estaban ligadas a la República, simplemente, por lazos de sangre, amor o amistad con personas afines a la causa republicana».

García Prieto explicó que aunque la represión sobre la mujer fue cuantitativamente menor, pues eran menos, cualitativamente fue más dura «con castigos específicos de género y, en ocasiones, de mayor intensidad que la ejercida sobre los varones.  Las vencidas sufrieron, además de una fuerte estigmatización, una doble represión, por rojas y por mujeres, como consecuencia de ‘su insolencia’ al mostrar su oposición a los sublevados y al trasgredir con sus actuaciones el orden social, moral, cultural y de conducta tradicional que impuso el régimen franquista».

Habló García Prieto de una represión genérica, para hombres y mujeres, pero también una específica para mujeres, que atacaba a sus rasgos específicos. «Destacan las violaciones, las rapaduras de pelo, la ingestión obligada de aceite de ricino, las continuas humillaciones públicas asociadas a su sexo; los golpes y quemaduras en las zonas sexuales femeninas; la obstaculización de la maternidad; la separación de los niños de sus madres».

En la jornada del jueves volverán a viajar a ‘los lugares de la memoria’.
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