Uno de los principales cadáveres que hubo de cobrarse la modernidad en la época contemporánea fue el de la belleza. En el minucioso proceso de desencantamiento del mundo, lo bello debía de ser sacrificado porque había colaborado maravillosamente con todas las cosas no reales. El ideal, el canon o la misma mímesis estaban señalados como enemigos del pensamiento desde el ágora en la acrópolis por los principales filósofos de la Grecia clásica que querían espantar a las imágenes y expulsar a los poetas de la ciudad perfecta.
Los artistas de lo bello habían creado las visiones de lo inexistente que necesitaban las religiones, habían transformado pedazos de madera en santos y hasta en el mismísimo dios policromado. Con la guillotina en la Revolución Francesa y, poco después, con la invención de la fotografía, cuando la burguesía se alió con la ciencia, la razón y la técnica para mejorar la vida de la mayoría, se inició la muerte del arte que, principalmente y a lo largo de la historia, había sido el campo de lo bello.
Por ello resulta sorprendente, hoy en día, la existencia de una colección literaria dedicada a explorar los restos de ese gran monumento en ruinas. La editorial leonesa Eolas lleva, desde 2022, publicando libros dedicados a ella: la belleza de la infancia, la de los muertos, la de lo pequeño, la de los jardines, la del afuera, la del vagar, la de lo oculto, la de los locos, la del caminar, la de las cosas, la de traducir poesía, la del barrio, la del recuerdo, la de la ciencia, la de lo anómalo, la de la materia, la de lo bienaventurado, la de los cuentos, la de la urraca, y, finalmente, en esta última entrega y vigésima, la belleza de la huella, obra del poeta José Luis Puerto.
Toda la colección, dirigida por el novelista Gustavo Martín Garzo, cuenta con hermosas fotografías de José Ramón Vega en sus portadas y los restantes autores son Elisa Martín Ortega, Ildefonso Rodríguez, Tomás Sánchez Santiago, Darío Álvarez, Jorge Praga, Gonzalo Abril, Daniel V. Villamediana, Fernando Colina, Avelino Fierro, Marijose Tobal, Natalia Carbajosa, Ruth Miguel Franco, Luis Gonzalo Díez, José Manuel Sánchez Ron, Juan Carlos Arnuncio, María Ángeles Pérez López, Asunción Escribano, José María Merino y José Manuel Suárez.
La colección al completo es una obra en sí misma, hecha por cada uno de sus volúmenes en relación con el resto como capítulos de un sólo libro, y retrata la fragmentación del concepto de lo bello en una postmodernidad que acelera en el vacío a la vez que es melancólica, un tiempo actual en el que su presencia está diseminada como un recuerdo o una ruina.