Es traspasar la puerta y entrar en otra dimensión, como una sensación, un asombro y un empezar a descifrar el laberíntico universo de madera sobre tu cabeza. Los miles de listones perfectamente ensamblados sin un solo clavo son a la vez geometría, estructura y ornamento, unas veces policromados con pan de oro, otras con la madera en crudo, fueron pensados y ejecutados siglos atrás siguiendo una ‘muestra’, patrón o dibujo previo que se repite adaptándose a las dimensiones del lugar. Se trata de la Carpintería de lo Blanco o Armadura de Lazo, por su materia prima de madera de pino tan clara y por el enlazado entre estructuras que será en efecto el conjunto de la techumbre.
Como elemento constructivo y artístico es un legado único en el mundo, habida cuenta de su inicial influencia germana, desarrollado en sistema gremial por carpinteros cristianos muy especializados que se movían de manera itinerante para realizar los encargos por toda nuestra geografía.
España tiene la fortuna de albergar aún muchos ejemplos de este singular patrimonio cultural, etnológico e histórico, ligado en buena medida a las yeserías del arte islámico asentado en la Península pero desarrollado y ejecutado por carpinteros leoneses, castellanos, de reinos cristianos. Ya desde el siglo VII se tiene constancia de estructuras realizadas por este complejo sistema de cartabones de albanécar que da lugar a desarrollos de ruedas de varios brazos que encajan unas con otras gracias a la gran versatilidad de la geometría, adaptándose a las diferentes inclinaciones y planos que requieran las cubiertas de los edificios. En sus fases más avanzadas llegan incluso a desarrollar cúpulas de media naranja, de Bolsor, en un alarde técnico reservado solo para unos pocos ‘geométricos’, el más alto escalafón al que podían aspirar, mediante examen, los carpinteros especialistas de este gremio. El Domus, nuevo volumen geométrico generado por plantillas de simetría polar, se consigue por combinaciones de rueda de lazo no posibles en plano, pero sí en esfera. Muestra de ello es la cúpula del Salón de los RealesAlcázares de Sevilla, la más importante, o la de la Alhambra, hoy en el Museo Pérgamo en Berlín.
Como si de una película se tratara, llega hasta nuestros tiempos el ‘Breve compendio de la Carpintería de lo Blanco’ del arquitecto y tratadista Diego López de Arenas, publicado en Sevilla en 1633. A finales del siglo XX la filántropa Natividad Gómez-Moreno le da una copia al arquitecto Enrique Nuere Mataúco, varias veces premio Europa Nostra y miembro de la Academia de Bellas Artes de San Fernando, el cual, a través de una cita de Antonio Prieto y Vives, y de un microfilm con el manuscrito llegado desde una Universidad de Tejas-Estados Unidos por un estudiante, consigue descifrar tal estudio llegado del pasado. Comienza así una larga labor de investigación y recuperación de estas joyas que se encontraban en el más absoluto olvido, llegando incluso a tapiarse con cúpulas de yeso en época renacentista. Lo que no se miraba por estar en la oscuridad bajo capas de humo pasa a constituir un ‘nuevo’ elemento del patrimonio a tener muy en cuenta por su altísimo valor testimonial, artístico, constructivo y de desarrollo geométrico.León posee varios de los más hermosos ejemplos de armaduras de lazo, diseminados sobre todo por la zona sur occidental del territorio. Una novedosa ruta pone en relación 13 enclaves desde Félix de la Vega, pasando de norte a sur por Riego de la Vega, Santa Colomba de la Vega, La Bañeza, Azares del Páramo, Valcabado de Páramo, Grajal de la Ribera, Saludes de Castroponce, Alija del Infantado, Lordemanos, Santa Colomba de las Caravias y Villanueva de Azoague.El caso de Valcabado del Páramo es guión para otra historia de voluntades: David Fernández Cuesta, hoy ingeniero aeronáutico de 23 años, iba a misa con su familia a los 14, y como buen observador se daba cuenta del grave deterioro de la techumbre. «Es imposible» era la respuesta que obtenía cuando reclamaba su restauración, por lo que escribió a la prensa por su cuenta y riesgo, y ésta le contestó. Se inicia así una cadena de colaboraciones –que llegó a desbordarle– con Roberto Carro, secretario de la Junta Vecinal, realizando actividades para recaudar fondos, intervenciones en TV, Junta de Castilla y León, Obispado, Diputación y cooperación de Hispania Nostra. Hoy día el Proyecto Mecenazgo Mudéjar 956 es una realidad que ha sido reconocida con el Premio Concejo al Patrimonio. Igualmente la colaboración ciudadana ha tenido un importante eco en el caso de Villamayor de Campos, cuya Iglesia, con problemas estructurales, fue cedida por el Obispado al Ayuntamiento y éste a su vez se la traspasa a la Asociación Amigos de San Esteban, que crea el Centro de Interpretación de la Carpintería de lo Blanco, con una exposición permanente técnica visitable al público. La dinamización del patrimonio de las Armaduras de Lazo pasa por formar guías turísticos, recabar más mecenazgos de empresas o ciudadanos, mantener el apoyo institucional (Ayuntamientos, Comunidad Autónoma, Diputación, Comunidad Europea) ejemplo de ello José Luis del Riego, concejal de Cultura de la Bañeza, continuar con los cursos del Centro de los Oficios de León y los de verano de la Uned.A lo largo de este valiosísimo camino de estrellas, que se abre ante nuestros ojos como una armoniosa bóveda celeste, los racimos de mocárabes, las puntas de diamante, las ruedas de 9 o 12 brazos o los artesones componen imágenes de gran fuerza simbólica del universo, tal y como se pretendía y concebía en la época. La tintineante luz de las velas que iluminaba las iglesias aumentaba el efecto del infinito estrellado sobre las cabezas de los fieles.León, Toledo y toda la zona castellana exportó grupos de carpinteros a modo de pago o compensación a Al Andalus para que elaboraran las techumbres de la Alhambra.Destaca por tamaño, policromía y complejidad la armadura de Santa Colomba de la Vega, semioctógono regular con ruedas de 12 y de 9, de lazo ataujerado, estrellas y composiciones ornamentales casi indescifrables a base de triángulos equiláteros. En el almizate, único plano horizontal donde confluyen los paños, se disponen racimos de mocárabes como elementos característicos de las armaduras de cubierta. Hay que tener en cuenta el verdadero interés que supone el hecho de que los elementos estructurales y la decoración geométrica componen el mismo conjunto, es decir, que el propio diseño constructivo, la estructura, está diseñada para ser vista desde abajo ya como un todo ornamental.
Agustín Castellanos y Ricardo Cambas, profesores del Centro de los Oficios de León, han seguido con las labores de estudio constructivo y formación desde hace 20 años, por las que han sido galardonados con el premio Richard H. Driehause a las Artes de Construcción. A través del curso de verano que la Uned dedicó a esta disciplina artística, por iniciativa de Francisco Balado, conjuntamente con Angel María Martín, director técnico del Centro de Interpretación de la Carpintería Mudéjar Abulense, pudieron expresar el procedimiento geométrico para llegar a tal complejidad a partir de un par de sencillos cartabones extraídos por sistemas de bisectrices. La hábil utilización de sus ángulos va recortando los listones de madera siguiendo un diseño o ‘muestra’ preestablecido, por paños, en el suelo, hasta que en un momento dado todo se va ensamblando sin colas ni clavos en las alturas componiendo un cielo estrellado de un virtuosismo técnico difícil de imaginar. Éste era además el techo de la edificación, sobre el que se ponen directamente las tejas.
Javier de Mingo, arquitecto colaborador del ‘Maestro’ Enrique Nuere, introdujo en sus ponencias la importancia de este hecho conjuntivo, donde el resultado visual, simbólico y artístico es a la par la solución geométrica a un problema constructivo, consiguiendo de ese modo la estructura de la techumbre realizada con medios cercanos y sostenibles.
Obras como las de la Iglesia de Villamayor o Alija del Infantado (con pinjantes similares al artesonado de la Sala Capitular de San Marcos) así lo muestran, así como la policromada instalada en el Parador de Benavente. La regularidad continúa incluso en paños diferentes con perspectivas distintas.
Finalmente, el Director del Curso ‘Universos de Madera’ de la Uned, el historiador Antonio Perla, profundizaba en el erróneo concepto de Mudéjar, argumentando que la Historia no está compartimentada entre islámicos y cristianos, que no se reconquista lo que no se ha perdido y que el lenguaje artístico tiene una continuidad entre la producción de las diferentes culturas, una mutua mirada e inspiración.
Marina Sánchez es la delegada en León de la asociación Hispania Nostra.
Carpintería de lo Blanco, el infinito sobre nuestras cabezas
Estructura, geometría, ornamento
04/07/2023
Actualizado a
04/07/2023
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