‘Dream Scenario’
Director: Kristoffer Borgli.
Intérpretes: Nicolas Cage, Michael Cera, Julianne Nicholson, Dylan Gelula.
Género: Comedia / Fantasía.
Duración: 101 minutos.
¿Quién no ha soñado con ser famoso? Todos hemos alzado la vista hacia ‘celebrities’ o ‘influencers’, y aspirado a ser por una vez los admirados y no un admirador más. Pero la línea entre el amor y el odio es muy fina y en la era de la información, donde todo el mundo puede manifestar tanto cada inmérito logro como cada minúsculo error, esta no hace más que estrecharse. Hasta el punto de que una persona puede saborear los néctares de la notoriedad y ser arrastrado por el barro de la cancelación de un día para otro, sin necesidad de mover un dedo, dejando que la muchedumbre haga el resto. ‘Dream scenario’ expone el ridículo de este concurso de popularidad multitudinario mediante el que elegimos nuestros ídolos de hoy en día apegándose a la esencia de este sistema de selección: con una comedia con tintes de ciencia ficción, donde lo que es real y lo que no poco importa.
La película se enfoca en Paul Matthews, un profesor de biología corriente y moliente, que se convierte en una celebridad de la noche a la mañana, y nunca mejor dicho, ya que comienza a aparecer en los sueños de millones de personas. A pesar de que en un principio disfruta de su recién adquirida fama de ensueño, esta no tardará en convertirse en su pesadilla personal.
‘Dream Scenario’ tiene una de las premisas más originales que haya escuchado, una idea bizarra y onírica en cuyo centro se encuentra Nicolas Cage cargándola sobre sus histriónicos hombros, que de no ser los suyos, podríamos estar ante un prometedor fracaso. Porque esta historia solo podía hacerla el hombre, el mito, la leyenda en la que efectivamente se ha convertido Cage. Hay mucho de Nicolas en Paul, quien pareciendo haber dejado sus mejores años atrás, resurge de sus cenizas gracias a la gente, por razones extrañas a su persona. En la segunda década de los 2000 el actor de ‘Leaving Las Vegas’ no hizo mucho por mantener su, hasta entonces, buena reputación. A pesar de ser su etapa más prolífica en cuanto a proyectos se refiere, estos fueron en su inmensa mayoría fracasos que le daban de comer. Sin embargo, por azares del destino, coincidiendo con el apogeo de las redes sociales y el consiguiente surgimiento de las imágenes y videos distorsionados con fines caricaturescos y difundidos a través de internet, en otras palabras, de los ‘memes’; este se erigió como uno de sus principales exponentes entre los usuarios, quienes poblaron la red de sus actuaciones más extravagantes y desmandadas, volviéndose así un icono para nuevas generaciones. Cage ha sabido surfear esta nueva ola con estilo, subiéndose de nuevo al tren del éxito, con papeles cada vez más relevantes y en los que viene demostrando sus genuinas dotes actorales, todo gracias a la inconsciente solidaridad de la gente. El tiempo dirá si como Paul, sus salvadores acabarán siendo sus verdugos.
La disección paródica que ‘Dream scenario’ hace de la cultura de la cancelación es magnífica, mostrando la fragilidad de la gloria, que puede quebrarse sin previo aviso por algo que ni tan siquiera quienes repudian a Paul Matthews por ello saben si realmente ha hecho. En la película hay un claro punto de inflexión donde este comienza a ser víctima de su propia fama, pero su ignominia no viene de lo que realmente hace, que resulta ser hasta cómico, sino por aquello que los demás sueñan sobre él, acusándolo de protagonizar sus ahora pesadillas, que nada tienen que ver con el auténtico suceso. Esta broma cruel del destino rima con la triste realidad de nuestros días, donde defenestramos al actor, cantante o político de turno por rumores alimentados por nuestros propios prejuicios, mientras sus verdaderos pecados pasan inadvertidos para una ciudadanía que si no lo ve en el telediario o en Twitter, no se lo cree.
Aunque en la superficie pueda parecer una comedia más con una cara conocida al frente, cuando uno se adentra en este ‘escenario de los sueños’ va descifrando una película cuyo ingenio está a la par de su rareza, con multitud de referencias ocultas a simple vista a la sociedad hormiguero que habitamos, teledirigidos por un entorno parcial y voluble como el ya teorizado en su día por Carl Jung en sus estudios sobre el inconsciente colectivo, más relevantes hoy que nunca en un mundo cada vez más homogéneo, donde las redes sociales se han convertido en el gran hermano a través del cual compartimos nuestros gustos y miedos, por irracionales que sean.
Sin embargo esta solo es una de las muchas lecturas extraíbles de la película del director noruego Kristoffer Borgli, quien no detiene su sátira en el colectivo y también expone una de los mayores cargas que muchos sufren a nivel personal: la mediocridad. Paul siempre ha querido publicar un libro de biología, pero nunca consigue escribir una sola palabra. Es un espectador en su propio sueño, así como lo es en los sueños de los demás. Y cuando le llega su fama inmerecida esta es tan solo una tirita para su orgullo herido, que salpica a los que le rodean con su frustración e indecisión, traducidas en pesadillas para los que antes soñaban con él como un mero transeúnte. Para cuando consigue publicar su libro, ese ya no es sueño. Para entonces ambiciona todo aquello que ha perdido por el camino de su falso éxito, que no era mucho, pero era suyo. La moraleja de esta historia es que uno no puede disfrutar plenamente de aquello por lo que no ha luchado, y quien no pelea por alcanzar aquello a lo que aspira, difícilmente luchará por mantener lo que da por sentado.
Poco más se puede decir de ‘Dream Scenario’ sin estropear una cinta que merece la pena juzgar de primera mano, protagonizada por un Nicolas Cage pletórico, que nos deleita con una de sus mejores y más personales interpretaciones, pero en la que podrías ver reflejado a más de un ‘influencer’ caído en desgracia.