El cuerpo central del festival se desarrollará desde este viernes y hasta el domingo en el Palacio de Exposiciones con los conciertos a cargo de ocho bandas nacionales e internacionales como principal reclamo, aunque también habrá presentaciones de libros, mercadillo de ropa y complementos, feria del disco, food trucks, proyección de clips musicales de los años 60 y una selección de pinchadiscos que ofrecerán variedad de estilos bailables y afines a la filosofía del festival, siempre fieles al vinilo.
El cartel de bandas en directo lo conforman The Kaisers (Reino Unido-Escocia), The Neatbeats (Japón), The Excitements (Barcelona), The Mocks (Países Bajos), Televisionaries (Estados Unidos), Los Imposibles (Madrid), Vosotras veréis (Madrid-León) y Hammond & Rogers: Tributo a Dr. Lonnie Smith (Madrid-León).El precio del abono en venta anticipada es de 50 euros y en taquilla de 55 euros y el de la entrada suelta es de 30 euros en venta anticipada y de 35 euros si se adquiere en la taquilla.
La implicación del artista Jonathan Notario no se circunscribe solamente a la exposición ‘Panavisión 70’, que este jueves se inaugura a las 20:00 horas en la galería Ármaga y que podrá ser visitada hasta el 15 de octubre, sino que también es el diseñador del cartel de este año. Sobre la muestra propiamente dicha, desde la galería que regenta Marga Carnero se destaca que «Notario crea vínculos imposibles entre el cine y la pintura, rompiendo sus relaciones espacio-temporales mediante el uso de diferentes narrativas herederas del cómic, en una inédita propuesta del artista». En este sentido –prosiguen las mismas fuentes–, «la exposición nos muestra obras pictóricas del formato proporcional al Panavisión 70 y otros formatos cinematográficos existentes, donde la música participa de una manera sutil en la muestra, complementando la experiencia a modo de banda sonora», sugieren desde una galería con la que Jonathan Notario ha estrechado vínculos desde que en septiembre de 2019 fuera la sede de su exposición ‘En los límites de la realidad’, con la que ‘Panavisión 70’ mantiene bastantes puntos de conexión, y con la que este mismo verano ha viajado hasta la Feria Arte Santander para presentar el proyecto ‘No hay nada que ver aquí’. Sobre esa conexión entre la muestra de 2019 y la actual, Notario señala que a pesar de haberse movido en diferentes disciplinas artísticas, los dos últimos años los ha dedicado de pleno a la pintura y la conexión entre ambas pasa inevitablemente por el cine como principal fuente de inspiración. «En el caso de ‘En los límites de la realidad’ había más influencias, aparte del cine, mientras que en ‘Panavisión 70’ se puede decir que es enteramente cinematográfica. Sí es cierto que utilizo este título más a nivel conceptual, pues algunas de las obras que presento no responden exactamente a este formato que alcanzó su mayor apogeo precisamente en los años 70. Además, el título también tiene que ver con una especie de expansión de la mirada. Hay cuadros que están compuestos de otros cuadros hasta formar trípticos o polípticos, cuadros que provocan en quien los contempla un efecto envolvente, como también sucede con las películas rodadas con lentes anamórficas de Panavisión».
Jonathan Notario reconoce que desde siempre el cine ha sido una de sus grandes influencias, que ahora traslada a la pintura pero que con anterioridad también ha estado presente con el vídeo o la instalación. «La narrativa del cine ha influido en la manera en que yo narro en mis obras, donde están presentes un planteamiento, un nudo y un desenlace. Aunque el cine también me ha marcado desde el punto de vista formal, en la composición y en la luz. De hecho cuando estoy viendo una película en realidad estoy viendo cuadros. A veces los planos que más me interesan son insertos que suelen pasar desapercibidos para el espectador», señala un artista que utiliza el color de una manera emocional y que en ‘Panavisión 70’ hace guiños a títulos como ‘Pink Flamingos’, ‘Robocop’, ‘Regreso al futuro’, ‘Deliverance’ o ‘El padrino’, estos dos últimos realizados en la década de los setenta, una época especialmente apreciada por Notario, cuyo espíritu ha querido trasladar a la banda sonora que acompaña a la exposición, que cuenta con diversidad de estilos pero donde se nota la influencia de la música de Morricone para los ‘spaguetti-western’ de Leone.