A través del Instituto Leonés de Cultura (ILC), la Diputación de León desarrolla una serie de actividades en las que colabora con ayuntamientos, juntas vecinales y asociaciones de la provincia a las que se suman, durante estos meses, las del programa ‘Veranos culturales’, y una serie de talleres de diferentes materias como el arte y las exposiciones, el patrimonio cultural –que recoge los juegos tradicionales o la alfarería– y, por último, los de animación a la lectura.
La institución cuenta con un programa cultural estival específico, que llega a 218 localidades En total, la institución provincial ha programado un total de 1.050 actividades que se desarrollarán en alrededor de mil localidades de la provincia y en las que, según las estimaciones, participarán unas 50.000 personas. Para todas ellas, la Diputación ha destinado un presupuesto global de cerca de 600.000 euros.
«Que el pueblo más pequeño tenga la oportunidad de acceder a la cultura», explicó Majo, es el fin de estas actividades que tratan de ser, además, «una forma de atraer turismo y generar riqueza».
En cuanto a las actividades culturales en las que la Diputación colabora con las programaciones de ayuntamientos, juntas vecinales y asociaciones, se destina un total de 278.000 euros, para que «los vecinos del área rural y los que visitan los pueblos durante el verano puedan disfrutar de las artes escénicas, plásticas, musicales o literarias, además de la música y de nuestras tradiciones. Estas actividades van desde mercados artesanos a teatro, exposiciones, veladas de tradición oral, música tradicional, talleres o filandones», aseguró el presidente.
El objetivo de estas actividades es, según apuntó Martínez Majo, "devolverle la cultura a los pueblos" A todas estas actividades se suman los ‘Veranos culturales’ organizados desde la propia institución provincial y que promueven la llegada de actuaciones musicales, de danza, espectáculos circenses, música o teatro a los pueblos de la provincia. En esta edición, las diferentes actividades se desarrollarán en 82 ayuntamientos y 69 juntas vecinales, «atendiendo todas las peticiones» que se han recibido este año, confirmó Martínez Majo. Este plan cuenta con un presupuesto de 80.000 euros.
Por último, la institución organiza cerca de 600 talleres en las que participarán unas 23.000 personas y en los que se invierten 200.000 euros. Pueden ser de tres tipos: de arte y exposiciones, que van desde la pintura hasta la estampación pasando por muralismo, títeres o pintura en espacios públicos, de los que va a haber 261 en 226 localidades de la provincia; por otra parte, están los talleres de patrimonio cultural, que tratan de recoger juegos tradicionales, curtido de cuero, alfarería antigua romana, restauración de bienes muebles de la cultura tradicional o conservación de indumentaria tradicional, un total de 60 propuestas que se desarrollarán en otras tantas localidades de la provincia; por último, hay talleres de animación a la lectura con cuenta cuentos, magia o documentales, de los que habrá 232 sesiones, el 30% de ellas desarrolladas en los colegios rurales a los que llega el Bibliobús.
Tres nuevas líneas de ayudas
Durante la presentación de estas actividades, que se desarrollan desde el ILC, dependiente de la Diputación provincial, el presidente explicó también tres nuevas líneas de subvenciones en materia cultural que ha puesto en marcha la institución, además de las ayudas a las 14 escuelas de música de la provincia, los bienes muebles de la cultura tradicional –como los pendones– y el patrimonio inmueble de interés etnográfico.La primera de estas tres ayudas va destinada a particulares para la restauración de hórreos y palomares, a la que se destinarán 100.000 euros ampliables en otros 50.000, según las solicitudes. La segunda, va destinada a los ayuntamientos que quieran digitalizar sus fondos archivísticos y, la tercera y última, se destinarán 30.000 euros a la promoción y recuperación de la música tradicional.