Desde el pasado 12 de mayo y hasta el 14 de junio próximo, en el Claustro Abierto Capuchinos del convento San Francisco de Asís de León, Carlos Pérez presenta su ‘Diario de inquietudes’, que aúna dos exposiciones que hablan de un mismo tema: «la soledad», que, si bien son dos escenarios distintos en los que ocurre, se viene adueñando de las almas de las personas, sobre todo en el mundo occidental, cuyas derivas distan bastante del camino soñado.
Carlos Pérez expuso en 2017 ‘… de la soledad’ en el Museo de León, exposición que pretendía mirar de frente al aislamiento del individuo en las grandes urbes como consecuencia tanto de la velocidad de las cosas como del veloz avance de la tecnología que permite y empodera un tipo de relación en exceso pragmática pero a la vez distante y fría. El descubrimiento de la triple w nos ha catapultado a un inmenso universo nuevo que no estamos sabiendo manejar y se está apoderando de nuestras vidas. «En las grandes urbes, con miles de personas a nuestro alrededor corriendo de un lado para otro, nos hacemos invisibles», nos dice Carlos.
En ‘Ya no queda nadie’, exposición realizada el pasado año 2023 en la galería Espacio_E, el autor deposita su mirada en la soledad que invade los espacios que se vacían de manera inexorable por la diáspora recurrente que se viene produciendo en las pequeñas ciudades y pueblos, en busca de oportunidades y una supuesta mejor vida.
«Es transitable pero angosto el camino del abandono; es pesaroso y soportable a la vez. La huida puede ser voluntaria, pero casi siempre es forzada por acontecimientos que nos desbordan como individuos. Hay lugares, demasiados ya, dentro de cada uno y a nuestro alrededor, en los que casi no queda nadie».
‘Diario de inquietudes’ se puede visitar en el claustro de los franciscanos hasta el 14 de junio de lunes a vier en horario de 17:30 a 19:30, los sábados de 18:00 a 20:00 y los domingos de 11:30 a 13:30 horas.