El presidente de la institución provincial, Juan Martínez Majo, aseguró durante su intervención que este congreso supone «una oportunidad para, además de profundizar en la figura de Gaudí y su obra, dar a conocer la provincia de León, una tierra afable y hospitalaria que ofrece mucho y bueno patrimonial, cultural, social y gastronómicamente a los miles de visitantes que por ocio o trabajo recorren nuestras ciudades y pueblos», destacó el presidente, para quien Gaudí y su obra es un símbolo que nos identifica como leoneses, individual y colectivamente, y que a su vez nos conecta con el resto del mundo. «Nuestra querida provincia se hace universal gracias al majestuoso Palacio Episcopal de Astorga, la Casa Botines de León, así como los talleres alfareros de Jiménez de Jamuz de los que se nutría de ladrillos el genial arquitecto catalán», indicó el presidente.
Otro de los presentes ayer en el Palacio de los Guzmanes fue el alcalde de Astorga, Arsenio García, quien resaltó que tanto Astorga como León «reafirman ese carácter internacional, cosmopolita y globalizador de la mano del genial arquitecto español y catalán Antonio Gaudí». Para el regidor astorgano esos «dos sueños convertidos en piedra», como son el Palacio Episcopal y la Casa Botines, «ayudaron a Astorga y a León a formar parte de la primera línea de la modernidad en el siglo XX y que hoy, en el primer tercio del siglo XXI, se renueva de la mano de este congreso internacional, que es uno de los eventos señeros que va a dejar huella en la ciudad de Astorga y también en León».Víctor Murias, director del Palacio Gaudí, aseguró que este evento «marcará un antes y un después, para el cual nos hemos venido preparando a nivel de infraestructura, tecnológico, de recursos humanos y de mucho tipo de inversiones para acoger un congreso internacional sobre una figura tan importante como Antonio Gaudí», destacó Murias, que con este congreso se han marcado como objetivos. Por una parte la visibilización de la obra de Gaudí fuera de Barcelona, al contar tanto León como Astorga «con dos marcas internacionales únicas, como son Gaudí y Camino de Santiago», y por otra el estudio y la innovación en torno a un edificio «que requiere de una atención necesaria para, al igual que otros edificios de Gaudí, poder ser estudiados, investigados y poder acercarnos a ellos desde diferentes punto de vista y que de alguna manera nos muestren uno de los bancos de prueba que Gaudí tuvo y que más tarde puso en práctica en muchos otros edificios».
Carlos Canals, consejero delegado del Congreso Mundial de Gaudí, reconoció que en este tercer congreso se percataron de la necesidad de abrirlo a la gente joven y a la innovación. «No es que el estudio histórico sea insuficiente, pero creemos que hay que involucrar más a la sociedad y por este motivo hemos pensado que a partir de ahora debemos de estructurarlo en seis líneas de trabajo diferentes, como son nuevas tecnologías, diseño, liderazgo, sociedad, medio ambiente y nuevas economías», destacó Canals, que a la hora de enfocar este congreso han recurrido tanto a expertos que llevan muchos años estudiando la obra del arquitecto catalán «como a empresas que actualmente están utilizando metodologías de innovación, que curiosamente se asemejan a los métodos de trabajo de Gaudí, y a otras empresas de futuro que pueden llegar a utilizarlos más adelante», aseguró el consejero.