Desde muy pequeño me llamó mucho la atención este colorido pájaro que en invierno veía en bandadas desde la ventana de mi casa en Cistierna alimentándose en los cardos de los prados. Un señor mayor cuyo nombre no recuerdo, los capturaba con liga, atraídos por un precioso macho que llevaba en una pequeña jaula de madera y que con su canto los atraía a su perdición.
Mucho ha cambiado desde entonces, y ahora hacia las aves en general y hacia los jilgueros en particular, hay un sentimiento muy diferente al de esos años.Desde hace unos diez años fotografío a placer a estos simpáticos pájaros en mi jardín de Pobladura de Bernesga. En lo más oculto de un seto o de una conífera, anidan temporada tras temporada sin que nadie les moleste.El jilguero tiene unas características que lo hacen inconfundible, sobre todo por lo que se refiere a su colorido plumaje. Destaca, cómo no, su mascara facial roja. En las alas negras poseen unas bandas amarillas y blancas. El pico es fuerte y afilado, lo que les es muy útil para acceder a las semillas de muchas de las plantas de las que se alimentan.Su alimento predilecto son las semillas de cardo, por algo su nombre científico es «carduelis carduelis». Además de estas, consume otro tipo de semillas como negrilla, cañamones, nabina, perilla o incluso ciertos frutos y brotes tiernos.En cuanto a su hábitat, le gustan zonas ajardinadas, lindes de bosques, huertos, zonas de cultivo, y en general casi cualquier zona en la que abunden los cardos y que no sea muy boscosa.
Las diferencias entre machos y hembras son casi inapreciables, solamente un color más vivo del macho nos puede ayudar a diferenciarlos. Sí existen diferencias apreciables con los juveniles, los cuales hasta su primer muda no poseen los colores faciales de los adultos.
Lo que hace famosos a los jilgueros es precisamente lo que les ha hecho ser capturados y criados en cautividad: su canto. Son pájaros muy activos y alegres, y dicha alegría la demuestran cantando, y por eso han sido desde siempre muy apreciados por los amantes de la avicultura.
Pero donde realmente son alegres y podemos disfrutar de su canto en todo su esplendor es en libertad, en nuestros jardines, parques, prados y campos.
El pequeño cantarín
Lo que hace famosos a los jilgueros es precisamente lo que les ha hecho ser capturados y criados en cautividad: su canto
18/08/2022
Actualizado a
18/08/2022
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