Al finalizar el verano los glaciares pirenaicos se ven bastante reducidos y lo que era nieve se convierte en hielo y roca. El permafrost desaparece y las rocas son más proclives a desprenderse, aun así se puede iniciar la ascensión a esta cumbre aunque tomando las debidas precauciones y no ocurra lo que está pasando este año.
La ascensión a este pico se puede comenzar desde dos puntos de inicio, por un lado la Besurta llegando a la Renclusa y pasando por el Portillón para andar todo el glaciar, llegar a la collada de Coronas y desde allí atacar la cima, o bien iniciarlo desde el Puente de Coronas en la vertiente sur. En el relato que sigue se va a mostrar la primera ruta, que es la más común entre los montañeros.
El estado de la nieve y el hielo en los glaciares va a ser diferente dependiendo de la fecha en la que se haga la ruta, pero lo que sí es seguro es que se va a caminar por nieve más o menos helada y por tanto son necesarias botas de montaña, piolet y crampones.
Se considera ruta difícil a pesar de que no hay ninguna dificultad técnica que imponga la escalada o trepadas, sino por su desnivel, el recorrer los glaciares y el paso final para alcanzar la cumbre.
Hace varios años un grupo de más de 30 leoneses realizó esta ascensión dentro de las rutas del campamento de Pirineos del grupo de montaña Yordas.
El inicio de la ruta se realiza desde de los Llanos de la Besurta, a 1920 metros de altura, donde llegan los autobuses de los aparcamientos de los Llanos del Hospital o de Benasque. A partir de este punto se sigue un camino bien señalizado hacia el refugio de la Renclusa, a 2.160 metros, que dura unos 35 minutos aproximadamente para recorrer poco más de un kilómetro y medio que los separa.
Una vez en el refugio, o quien sale del mismo por haber dormido allí se toma otro camino estrecho y pedregoso muy zigzagueante porque el desnivel que supera es considerable. Hay muchos hitos que lo señalan, y distintos caminos, aunque lo más natural es seguir en dirección SE la ruta que va paralela a cresta de los Portillones que se extiende desde el Pico de la Renclusa al de la Maladeta.
Pasado un primer tramo de camino por la roca se alcanza un glaciar por lo que resulta necesario calzar los crampones, que al finalizar la nieve deben quitarse para seguir por la roca hacia el Portillón superior, a 2.870 metros de altitud que se identifica por una aguja a su izquierda (procurando no pasarse porque luego se debe bajar) y por ese paso se debe seguir, bajando hacia el glaciar del Aneto, el más largo, que si tiene bastante nieve suele disponer de un camino estrecho pero que se pasa bien y si se ha ido la nieve la cosa se complica porque suele haber hielo muy peligroso por la pendiente existente en el glaciar.El paso del glaciar se hace en diagonal por una larga y más suave subida hasta el collado Coronas a 3.198 metros de altitud, desde comienza la parte más pendiente y complicada de la ascensión, un tramo de glaciar en fortísima pendiente para llegar a la antecima a 3.250 metros de altitud y desde allí al llamado paso de Mahoma a 3.390, que es un estrecho paso entre dos abismos de apenas 50 metros, pero que al coincidir en la antecima los distintos recorridos y al subir generalmente todas las personas al mismo tiempo, es posible que se formen embotellamientos y haya que esperar para pasar a la cumbre de 3.404 metros con una gran cruz y una pequeña virgen del Pilar por eso de estar en Aragón.
Para el regreso de debe volver a cruzar el paso aéreo de Mahoma, llegar de nuevo a la antecima y hacer el mismo camino de vuelta que se hizo a la ida, teniendo en cuenta llegar a la Basurta para coger al menos el último autobús, si no se duerme en la Renclusa y se vuelve el día siguiente.
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Actualizado a
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