En marcha ‘Luna de Cortos’

El festival de cine ‘Luna de Cortos’ calienta motores para preparar su tercera edición, que tendrá lugar del 4 al 7 del mes de agosto y vendrá cargada de novedosas secciones y actividades.

A la espera de dar a conocer el país invitado de este año, así como el ya acostumbrado homenaje a la trayectoria interpretativa, o las diferentes iniciativas que se llevarán a cabo, ‘Luna de Cortos’ abre un espacio a la creatividad y al talento en su tercera edición con la convocatoria del primer concurso de carteles.

Para la Asociación D-Spiert@, impulsora y organizadora del evento durante las tres ediciones de historia de ‘Luna de Cortos’, esta propuesta es una apuesta de futuro. "Será una aportación interesante al festival, con muchos puntos de vista diferentes sobre la filosofía de este evento audiovisual que ya se ha convertido en un referente nacional dentro de los festivales de cortometrajes", señala el director del festival, Bal Ferrero, que añade que "estamos seguros de que hay sensibilidad por el arte en todos los lugares del país y merece la pena explorar otros territorios creativos".  

El concurso tendrá carácter nacional y además de un premio en metálico, el ganador será la imagen del III festival ‘Luna de Cortos’. Éste se designará mediante jurado. Además, también se otorgarán diplomas y accésits; uno de ellos a votación popular.

La temática será libre, siempre que confluya con la filosofía del festival y esté vinculado con el entorno cinematográfico o con el audiovisual.

Los trabajos deben enviarse, en formato PDF o JPG, antes del 30 de marzo a la dirección de la Asociación D-Spiert@ (Calle Santo Domingo de Guzmán, 48- 24350, Veguellina de Órbigo –León) o a través del correo electrónico E-mail: organización@lunadecortos.es.

Las bases se pueden consultar a través de la página web lunadecortos.es y de las redes sociales del festival (facebook y twitter).

Y así arrancan los preparativos del III ‘Luna de Cortos’; un festival que en su segunda edición fue premiado con la medalla Lumière del Cine, dobló la recepción de obras con respecto a la primera edición, contó con un gran número de profesionales del sector y, lo más importante, que sigue funcionando con el objetivo de acercar el séptimo arte, en su vertiente más joven y arriesgada, al entorno rural, en la localidad de Veguellina de Órbigo.