"Este disco es lo que soy: ‘granaína’, puta y fina"

A ella no le importa que la miren de arriba abajo. Al contrario; le encanta. Nacida para la provocación y con el escenario como destino insoslayable, Inés López Mañas (Peligros, Granada, 1986) se convirtió un buen día en Vinila von Bismark para desarrollar su talento sobre las tablas. Ya sea cantando, interpretando o luciendo sus incontables tatuajes, Vinila lo hace todo con mucho arte. Esta noche muestra en El Gran Café las canciones de ‘A place with no name’, su primer disco en solitario. Puro espectáculo.
         
– Intimista, mezclando estilos y sin olvidar el baile. ¿Este álbum es su trabajo más personal?
– Es un disco diferente a lo que venía haciendo con mis grupos anteriores. Hay un par de temas más lentos pero el baile permanece en el resto del álbum. Mi lado rockero sigue estando ahí, aunque sí es cierto que en las canciones de este trabajo quise poner el corazón encima de la mesa, mirando hacia mi tierra natal, Granada. Por eso hay melodías más exóticas, con flamenco incluido, pero trasladado todo al rock.

Hemos perfeccionado nuestros conciertos desde que comenzamos la gira. Ahora ofrecemos un gran show audiovisual – ‘A place with no name’ se grabó en los prestigiosos estudios ‘Valentim de Carvalho’, en Lisboa. Con el productor que usted quería y con un micrófono que tiene su historia…
– Fue muy especial. El micro que utilicé fue el mismo que utilizó en muchas de sus canciones la ya desaparecida Amália Rodrigues, reina del fado en Portugal. Imagínese… Fue un honor trabajar en esos estudios, en los que también han grabado grupos como los Rolling Sones. Pero lo más importante fue poder grabar con uno de mis productores favoritos...

– Paulo Furtado, también conocido como ‘The legendary tiger man’…
– Eso es. Yo sentía que él era el único que podía ayudarme a trasladar al disco lo que yo tenía en la cabeza. Por su forma de trabajar, como productor y como músico, y también por su forma de ser, Paulo era el ideal para dar forma a este rock n’ roll poco convencional, un rock con toques árabes y flamencos al que la gente quizá no está acostumbrada pero que era lo que yo quería ofrecer, que para eso soy ‘granaína’, puta y fina (risas).  

– (risas) Vaya, no escuchaba esa expresión desde mis tiempos universitarios en Granada… A ver, que me descentro. Hay una buscada fusión de estilos en este álbum, vale. ¿Continuará la experimentación en próximos discos?
– Uy, todavía no puedo pensar en el futuro porque ahora mismo estoy intentando saborear al máximo este disco. Han sido dos años de trabajo preparando las canciones y el espectáculo que ofrecemos en nuestros conciertos. Ahora mismo no pienso en otra cosa que no sea disfrutar del momento y de esta gira.

Estaría encantada si pudiera hacer cine. Hay que probar cosas nuevas y nunca sabes lo que puede deparar el futuro – ¿Retomar la actividad con sus grupos anteriores es ya un imposible?
– Yo no cierro la puerta a nada. Todo depende de cómo hayas acabado con las otras personas. Si has acabado bien, como es mi caso, nunca se sabe lo que puede pasar. No me importaría en un momento dado volver a sacar un disco con Krakovia o The Lucky Dados.

– León es una plaza conocida para usted…    
– Sí, estuvimos no hace mucho pero en esta ocasión volvemos con cosas nuevas. Hemos ido perfeccionando los conciertos y creo que ahora ofrecemos un gran show audiovisual.
 
– La provocación la lleva también al teatro, donde ha triunfado con las obras ‘The Hole’ y ‘The Hole 2’, dando rienda suelta a su lado más extravagante como artista del ‘burlesque’. ¿Seguirá adelante con ello?
– Actualmente todavía actúo en ‘The Hole 2’, pero sólo cuando la gira me lo permite. Para mí ahora mismo lo prioritario son los conciertos para presentar el disco. Pero sí, cuando tengo unos días libres sigo participando en la obra.  

– ¿El cine es una cuenta pendiente?
– Bueno, nunca se sabe. Si a alguien le interesa contar conmigo para una película, yo estaría encantadísima. Hay que probar cosas nuevas y ya veremos qué nos depara el futuro.

–  Pues venga, dígame una película favorita…
– A ver… Le digo una de cine erótico: ‘Salón Kitty’ (1976), de Tinto Brass.

– A los de Peligros se les dice peligreños. En su caso, ¿peligreña y peligrosa?
– (risas) Sí, soy peligreña, pero sobre todo, peligrosa.

– ¿Una actriz de referencia?
– Marlene Dietrich.

– ¿Un hobby?
– Montar a caballo.

– Si Irene López Mañas no se hubiera convertido en Vinila von Bismark, ¿qué le hubiera gustado ser?
– Siempre algo relacionado con el escenario. Es lo que he mamado desde pequeña y sería inevitable.

– 2015, año electoral. ¿Le interesa la política?
– La verdad es que no. Creo que todos los partidos son igual de corruptos y no dejan de ser marionetas en manos de unos ‘illuminati’ que no sabemos quiénes son. El mundo de los políticos me parece absurdo.